El Patriarca caldeo pide oración por los cristianos que siguen volviendo a la Llanura de Nínive

El Patriarca caldeo, Luis Sako, ha hecho este Adviento un apremiante llamamiento para sostener el regreso de los cristianos a sus ciudades en la Llanura de Nínive, al norte de Irak.

Lo ha realizado coincidiendo con este tiempo de Adviento, recordando que la Llanura de Nínive es la cuna del cristianismo en Irak. El cardenal Sako dice que aún siente dolor cuando recuerda el éxodo desatado por el ataque de las milicias del Estado Islámico en 2014, que empujó a los cristianos a abandonar sus hogares. Dolor que se reprodujo cuando la liberación de esos territorios permitió conocer la destrucción y los saqueos perpetrados en casas, iglesias y escuelas.

En todo este tiempo de prueba los cristianos los cristianos iraquíes han contado con el apoyo concreto de fieles y benefactores de varias partes del mundo. Ahora, a dos años ya de la liberación, el Patriarca advierte que la derrota militar del Daesh en la región no significa que ya no haya que seguir asistiendo a sus habitantes y acudiendo en su auxilio. 

Y señala una necesidad fundamental: ayudar a los jóvenes para que puedan construir un futuro, y eso significa que puedan encontrar trabajo en su suelo patrio, para lo que insta a promover proyectos agrícolas y comerciales. También subraya que para que las familias puedan restablecerse en el área se necesita un plan global dedicado al sector de la Salud: una red de servicios que vayan desde pequeñas clínicas hasta algunos hospitales.

Se trata nada menos que de restablecer la vida en la Llanura de Nínive, sosteniendo y acompañando a los que deseen regresar. Por este motivo exhorta a todos los cristianos del mundo a rezar por todos aquellos que tienen el deseo de volver, que quieren reconstruir y vivir felices y en paz en esa hermosa llanura de Nínive, por la que pasa el futuro de los cristianos en Irak.