El padre Damián, a los jóvenes de la JMJ: "Descubrid que no estamos solos, que somos discípulos del siglo XXI"

El sacerdote redentorista, profesor de religión y cantante, transmite desde las pantallas y redes sociales la Palabra de Dios: "Aquí en Lisboa hay muchas ganas e ilusión"

Sara de la Torre

Publicado el - Actualizado

2 min lectura

El padre Damián María Montes, sacerdote redentorista, profesor de religión y cantante de 36 años, es 'influencer' (aunque no se considera como tal) que difunden la Palabra de Dios en redes. El también ha llegado a Lisboa para participar en la JMJ: "Es una experiencia de misión, de sencillez y búsqueda de Dios en el encuentro con la Iglesia universal. He estado en contacto continuo con los jóvenes y ellos han sido mi mejor formación. Venimos con más de 300 jóvenes redentoristas de España".

Por eso, en esta JMJ lo que buscan los jóvenes es descubrir que "no estamos solos, que son muchos los discípulos de Jesucristo en el siglo XXI". Una manera de testimoniar también el Evangelio a través de las pantallas siemore que tengamos claro que "el centro está puesto en Dios y en su anuncio, todo lo demás se relativiza, aunque a veces las críticas sean un poco más fuertes". Y nada mejor para lidiar con ellos que a través de su música. No en vano, el Padre Damián participó en el concurso de televisión 'La Voz' y sus canciones representan una parte muy importante de su vida: "La música es una herramienta maravillosa para encontrarnos con Dios".

Primera JMJ después de la pandemia

Y es que la JMJ es una ocasión importante para que los jóvenes se encuentren con el rostro de Jesús. Los jóvenes que ya llegaron a Lisboa, esperan a Francisco para vivir juntos la 37ª Jornada Mundial de la Juventud, la primera después de la pandemia del covid-19. Francisco llegará este 2 de agosto a Portugal con la certeza de que estos "encuentros tienen una gran fuerza en sí mismos, incluso la fuerza de cambiar, para alguien, su vida".

Por su parte, el padre Damián recuerda la primera vez que pudo ver a Benedicto XVI: "No sabía qué decirle, y de la emoción lo único que le pude gritar fue ¡España!... No sé cuál será mi reacción cuando le vea, porque en ese momento lo que manda es el corazón más que la razón. Lo que está claro es que le recibiremos con mucha alegría, porque ganas... ¡tenemos muchas!".