Macron y Le Pen, a por la presidencia de Francia: ¿Cómo han sido su relaciones con la Iglesia este lustro?
Como ya sucediera en 2017, ambos candidatos se disputarán este domingo la presidencia de Francia en las urnas. Macron parte como favorito, pero nada está cerrado
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Este domingo el pueblo francés elegirá en segunda vuelta a quien será su presidente en los próximos cinco años: el liberal Emmanuel Macron tratará de revalidar el cargo frente a quien fue segunda en la primera vuelta de los comicios, la líder del Frente Nacional Marine Le Pen.
Dos figuras en las antípodas ideológicas, sobre todo en lo que tiene que ver con política migratoria, la presencia islámica en el territorio francés o el futuro de la Unión Europea. En Ecclesia, repasamos algunas de las posturas que ambos candidatos mantienen sobre lo que tiene que ver con el ámbito religioso.
Emmanuel Macron
Las buenas relaciones con el Papa Francisco
El líder de 'En Marcha' contó en las elecciones de 2017 con el apoyo de un 62% de los católicos, por lo que se trató de un colectivo clave para que Macron llegase al Elíseo. Durante la Legislatura, el presidente de la República Francesa ha mantenido una relación muy cordial con el Papa Francisco, con quien se ha reunido en dos ocasiones, en junio de 2018 y el pasado mes de noviembre.
El Santo Padre además ha seguido muy de cerca los trabajos de reconstrucción de la Catedral de Notre Dame de París, tras sufrir un aparatoso incendio en abril de 2019. Macron también ha mostrado suma preocupación por el futuro de uno de los monumentos más simbólicos de la capital francesa.
Tras el incendio que destruyó parte del templo gótico, Macron mostró su compromiso de reconstruir Notre Dame en un plazo de cinco años, que concluiría, de cumplirse los plazos, en abril de 2024.
La Ciencia y Dios van de la mano
A nivel doctrinal, Macron firmó el pasado mes de diciembre un artículo el 'L’Expresso' en el que reivindicaba que “Dios y la Ciencia no se oponen porque la creencia en uno de ellos ha ido a menudo de la mano del desarrollo del otro”.
En este sentido, manifestó su convicción en que “puede haber continuidades entre Dios y la Ciencia, la religión y la razón. ¡Miremos a nuestra Europa! ¿La igualdad de los derechos humanos en dignidad y derechos no fue preparada por la igualdad de los hombres ante Dios pensada por el cristianismo?”. Todo para concluir que “la Ciencia y Dios, la razón y la religión pueden convivir, a veces incluso alimentarse mutuamente. Esto es incluso deseable, dado que la aspiración a la razón y la necesidad de trascendencia cohabitan en cada uno de nosotros”.
Los obispos rechazan la propuesta de Macron de incluir el aborto como derecho fundamental
Uno de los momentos más tensos protagonizados por Macron y la Iglesia Católica tuvo lugar a comienzos de este 2022, cuando Francia asumió la presidencia de la Unión Europea. Aquel día, el actual presidente instó ante el Parlamento Europeo a actualizar la Carta de Derechos de la Unión Europea e hizo hincapié especialmente en incluir el derecho al aborto como un derecho fundamental de la UE.
Unas declaraciones que generó el rechazo de los obispos, que en un comunicado expresaban la preocupación por la propuesta de Macron: “No existe un derecho al aborto reconocido en el derecho europeo o internacional. Intentar cambiar esto no solo va en contra de las creencias y valores europeos fundamentales, sino que sería una ley injusta, sin fundamento ético y destinada a ser causa de conflicto perpetuo entre los ciudadanos de la UE”.
Macron y el secreto de confesión
El pasado mes de octubre, el presidente de la República Francesa pidió a su homónimo al frente de la Conferencia Episcopal, Eric de Moulins-Beaufort, poner fin al secreto de confesión en la Iglesia.
Una petición que tuvo lugar horas después de que se presentase el informe de la Comisión Independiente sobre los Abusos Sexuales, en el que se calculaba que había unas 330.000 personas víctimas de abusos sexuales cometidos por sacerdotes, religiosos y laicos católicos.
Tras hacerse público el informe, la Iglesia francesa pidió perdón por estos casos. Entre las recomendaciones de la comisión para luchar contra la pederastia en el seno de la Iglesia en el futuro, proponían repensar el secreto de la confesión al que están obligados los sacerdotes.
A este respecto, el portavoz del Gobierno de Francia, Gabriel Attal, aseguraba que “nada es más fuerte que las leyes de la República". Por su parte, el propio Moulins-Beaufort aseguraba que la Conferencia Episcopal contempla reformas sobre el secreto de confesión para que los sacerdotes puedan conciliar ese sigilo sacramental con la necesidad de proteger a los menores.
"La amplitud de los actos de violencia y de las agresiones sexuales sobre menores revelados por el informe de la Comisión Independiente sobre Abusos en la Iglesia Católica (CIESE) impone a la Iglesia revisar sus prácticas. Es necesario trabajar para conciliar la naturaleza de la confesión y la necesidad de proteger a los niños", dijo en un comunicado Mons. Eric de Moulins-Beaufort.
Marine Le Pen y la islamofobia
En cuanto a Marine Le Pen, ha girado su campaña como ya hiciera en 2017 en el fundamentalismo islámico y el control de las fronteras: “Voy a volver a poner orden en el país acabando con la delincuencia y el terrorismo. ¡Francia para los franceses!”.
Le Pen ha sabido canalizar el creciente desarrollo de la islamofobia existente en el país en los últimos años, como consecuencia de la cadena de atentados y altercados públicos que se han producido en Francia por parte de los grupos terroristas pertenecientes al Estado Islámico.
La candidata al gobierno de la República, propone prohibir la "práctica, la manifestación y la difusión pública", tanto en el cine como en la prensa y en la escuela, de "ideologías islamistas". Además aboga por prohibir que las mujeres porten velo en público.
No obstante, durante la recta final de la campaña electoral Marine Le Pen ha suavizado esta última propuesta de su programa, prohibir el velo islámico en la calle. El presidente provisional de su partido, Jordan Bardella, subrayó que Le Pen ha indicado "de forma extremadamente clara que no es una prioridad" la prohibición del velo islámico en todo el espacio público.
"Es un objetivo" pero "no lo haremos mañana por la mañana", indicó en una entrevista a la emisora de radio France Info.