¿Matrimonio homosexual?, ¿mujeres sacerdote?: Las claves del Sínodo

Los trabajos de la segunda sesión del Sínodo sobre la Sinodalidad ya están en marcha: estas son algunas de las cuestiones que se abordarán hasta el próximo 27 de octubre 

Sínodo

Redacción Religión

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Este miércoles, 2 de octubre, ha arrancado de manera oficial los trabajos de la segunda sesión del Sínodo sobre la Sinodalidad, que se prolongará hasta el 27 de octubre. Más de tres semanas de reuniones que debe culminar en un documento para marcar el camino de la Iglesia en las próximas décadas.

El Sínodo de la Sinodalidad concluirá con una exhortación del Papa que deberá publicarse antes de junio de 2025, con las conclusiones sobre algunos temas importantes para la Iglesia católica.

De ahí la importancia de esta segunda sesión en la que participarán un total de 368 miembros, entre ellos 53 mujeres y unos sesenta cardenales. El papel de la mujer en la toma de decisiones y puestos de responsabilidad en la Iglesia o el mayor protagonismo de los laicos son dos cuestiones que estarán muy presentes en las reuniones del Sínodo, mientras que otras cuestiones como el celibato, el diaconado o el matrimonio homosexual no serán abordados en estas semanas de trabajo.

“La idea es que profundicemos más en cómo caminar juntos, ser una Iglesia que escucha y acompaña a todas las personas y encontrar la forma de anunciar a Jesucristo a los hombres y mujeres de hoy”, explicaba en 'Ecclesia al día' la presidenta de Acción Católica, Eva Fernández, que es una de las españolas que participan en el Sínodo.

El Papa Francisco ha recalcado que la segunda sesión del Sínodo de la Sinodalidad debe ser un espacio donde “todos se sientan valorados y escuchados” y reforzar la idea de que la Iglesia es un hogar para todos. “Escuchar y comprender las voces, es decir, las ideas, las expectativas, las propuestas, para discernir juntos la voz de Dios que habla a la Iglesia”, pedía Jorge Mario Bergoglio en la Misa de reapertura del Sínodo.

La cuestión LGTBI o el sacerdocio femenino: ¿Por qué no se abordarán 

Mucho se ha hablado a lo largo de este año sobre la posibilidad de abordar cuestiones delicadas en la Iglesia, como es el sacerdocio femenino o su diaconado, así como la cuestión LGTBI. 

En la primera sesión en octubre de 2023, se reafirmó la necesidad de acoger a todas las personas sin discriminaciones sobre orientación sexual, en el documento final desapareció esta nomenclatura por petición de algunos de los participantes.

El jesuita estadounidense James Martin, que se ocupa desde hace tiempo del apoyo a la comunidad LGTBIQ y que participará en el Sínodo, en un reciente artículo describió que muchos participantes expresan su contrariedad a cualquier acercamiento, bajo el argumento de que consideran que “las cuestiones LGTBI son una ideología; es una forma de neocolonialismo; es una preocupación del mundo occidental, apoyar a estas personas significa oponerse a la doctrina de la Iglesia, y las personas LGTBI odian a la Iglesia", explicaba.

Tal y como precisaba por carta el obispo de la diócesis de Winona-Rochester en EEUU, Robert Barron, que "los temas candentes de la ordenación de mujeres, el celibato el acercamiento a la comunidad LGBTI están básicamente fuera de la mesa, ya que han sido relegados a las deliberaciones de los grupos de estudio".

Una realidad que también destacó en TRECE Eva Fernández, presidenta de Acción Católica. Expresó que cuestiones como el diaconado femenino está en fase de estudio por parte de los expertos, pero ello no implica que en el Sínodo el papel de la mujer de la Iglesia no sea un tema a abordar en las sesiones: “Se avanzará en el camino de poner en valor los dones y carismas que aportamos las mujeres, cómo estar presente en los puestos de responsabilidad, cómo se nos puede escuchar más, cómo podemos estar en la toma de decisiones”.

Por ello, a lo largo de estas más de tres semanas se debatirán sólo diez temas que se presentaron el pasado marzo: el fortalecimiento de la papel de los laicos y de las mujeres en todos los niveles de la Iglesia, la escucha del grito de los pobres, la misión en el entorno digital, algunos aspectos de la figura y del ministerio del obispo (en particular: los criterios de selección de los candidatos al episcopado), entre otros.

El objetivo, fomentar la participación en parroquias y diócesis

Ahora la asignatura pendiente, planteaba la presidenta de Acción Católica en España, es concretar esta participación de los laicos en las parroquias y las diócesis: “Sabemos que será difícil, hay inercias de muchos años que va a costar cambiar, y es fundamental la conversión personal, de las estructuras, de la pastoral y ahí tendremos que confiar muchísimo. Confianza en que es obra del Señor, es un proceso complicado pero tengo la esperanza y estoy confiada en que daremos pasos no tan rápidos como nos gustaría, pero podremos hilar esos pasos y nos tenemos que implicar todos”, ha recalcado.