El milagro de la Batalla de Empel, motivo por el que celebramos la Inmaculada el 8 de diciembre

Este viernes España celebra la Inmaculada Concepción, patrona de España. Un dogma de fe de la Iglesia Católica que se promulgó en el año 1854

El milagro de la Batalla de Empel, motivo por el que celebramos la Inmaculada el 8 de diciembre

Redacción Religión

Publicado el - Actualizado

2 min lectura

España se viste de gala cada 8 de diciembre para celebrar a su querida patrona, La Virgen de la Inmaculada Concepción. ¿Sabes por qué se escogió este día y qué es lo que celebramos? La Inmaculada Concepción es un dogma de fe de la Iglesia Católica que se promulgó en el año 1854. Este dogma explica que María es la única persona en la historia de la humanidad que nació sin pecado original.

Dios pensó en María para ser su madre incluso antes de nacer. Por eso, decide preparala de forma especial y le concede la gracia de nacer sin ningún tipo de mancha. Todos los demás nacemos con esa tendencia al pecado, que nos limpia el bautismo. Pero la madre de Jesús no fue víctima de ese pecado original. Por ejemplo, si contemplamos la oración del Ave María, este dogma se ve reflejado: “Ave maria, gratia plena, Dominus tecum. Benedicta tu in mulieribus, et benedictus fructus ventris tui, Iesus.”

El milagro de la Batalla de Empel

El motivo por el que se eligió el 8 de diciembre para celebrar esta fiesta, se encuentra en la Batalla de Empel, cuando el ejército español derrotó al bando enemigo gracias a un milagro de la Virgen. Fue durante la Guerra de los Ochenta Años en Flandes, en 1585.

Un tercio de la armada española combatían en la isla de Bommel, concretamente en el monte de Empel. Pero... ¿Qué sucedió aquella noche? Uno de los soldados del ejército español, mientras cavaba una trinchera, se encontró con una imagen de la Virgen. Una tabla flamenca que reflejaba la Inmaculada Concepción de María.

Así que improvisaron un altar a la Virgen y se pusieron a rezar toda la noche. A la mañana siguiente, el agua se había congelado y el ejército pudo huir. Los españoles vencieron en Flandes una batalla que parecía perdida. Desde ese año, la Inmaculada Concepción fue proclamada patrona de los Tercios de Flandes e Italia.

La Virgen de la Inmaculada, patrona de España

La Iglesia declaró el dogma de la Inmaculada Concepción en el año 1854. Fue bajo el pontificado de Pío IX qué firmó la bula Ineffabilis Deus. Años más tarde, en 1708, por orden del Papa Clemente XI se declaró “fiesta de guardar”.

Bien en cierto, que desde la Edad Media ya se había defendido la figura de la Virgen. Por ejemplo, el monarca visigodo Wamba, está reconocido en el XI Concilio de Toledo (año 675) con el título de “Defensor de la Purísima Concepción de María”. Además, el el rey Carlos III creó una orden religiosa dedicada a esta Virgen. Tal era su devoción que la declaró patrona de todos los territorios españoles y de todas sus posesiones.