La religiosa carmelita de la sonrisa eterna que podría convertirse en la próxima santa argentina

Cecilia María de la Santa Faz es la religiosa argentina carmelita cuya causa de canonización se abrió el domingo 23 de febrero con una celebración Eucarística, presidida por el arzobispo de Santa Fe, Sergio Fenoy y concelebrada por su obispo auxiliar, Matías Vecino, Fray Ricardo Prado ocd, superior de la orden de los Carmelitas Descalzos, y el p. Andrés Rodríguez, postulador de la causa. 

La joven Cecilia María (1973-2016) se ha convertido, poco a poco, en una imagen de religiosa que transmite alegría gracias a la sonrisa que siempre esbozaba su rostro. Ella misma afirmaba que esa alegría "es un don del Espíritu Santo" porque es algo que nunca se había propuesto en serio. Durante la homilía, Fray Ricardo hacía hincapié en que la monja también se caracterizaba por un carácter fuerte y que tuvo la capacidad de sobreponerse a sus miedos y adversidades, pero siempre poniendo toda su confianza en el Señor. 

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Nacida en San Martín de los Andes, provincia de Neuquén, Argetina, Cecilia María Sánchez Sorondo encontró su vocación en el monasterio de las Carmelitas Descalzas ubicado en Santa Fe. Proveniente de una familia tradicional y sobrina de un obispo allegado al Papa Francisco (Monseñor Marcelo Sánchez Sorondo, canciller de la Academia Pontificia de Ciencias del Vaticano), falleció a los 42 años después de sufrir un cáncer de lengua.

El 20 de junio de 1998 recibió el Hábito de la Virgen, y casi un año después, un 5 de junio, hizo su profesión de votos de obediencia, castidad y pobreza por tres años.

A finales de 2015, fue enviada para terminar de cerrar el Carmelo de la localidad de Azul. Sentía unas molestas llagas en la boca, que cuando volvió a Santa Fe se hicieron más intensas y dolorosas. Fue a ver a un dentista y la derivó a un especialista en cabeza y cuello. Éste, de urgencia, la mandó a hacerse una tomografía de lengua y cuello. El resultado del estudio lo conoció el 11 de diciembre, el cual evidenció que tenía un tumor en la base de la lengua y en un ganglio en el cuello. Al primero que le dio la noticia fue a uno de sus hermanos: “El Señor eligió por mí y yo dije: ‘Confiá’. Otra cosa no puedo hacer”, le contaba Cecilia María.

la sonrisa que conquistó a argentina y ahora, al mundo 

La causa de canonización de ésta religiosa argentina tiene su origen en una imagen de ella misma  ingresada en el Hospital Austral que se viralizó hace casi ocho años en las redes, apenas 13 días antes de morir: la joven aparecía con una amplia sonrisa en los labios, conservaba la belleza de la juventud y la paz en el rostro, a pesar del sufrimiento que atravesaba por la cruel enfermedad que se la llevó de este mundo en poco más de seis meses. El camino hacia la santificación implica un proceso de estudio y evaluación por parte de las autoridades eclesiásticas, pero la historia y el legado de esta joven religiosa despiertan la atención y la esperanza de muchos fieles.