Siete años en Mongolia: así fue la experiencia de misión de la familia Natek Bueno

Este domingo en el programa de TRECE, 'ECCLESIA', hemos conocido el testimonio de una familia misionera que estuvo siete años en Mongolia.

La familia Natek Bueno tuvo que volver a Valencia por la enfermedad de uno de sus hijos. Sin embargo, conservan unos recuerdos muy bonitos de aquellos años en el país: “El Señor nos concedió ser una familia de misión y estuvimos en Mongolia anunciando el Evangelio desde el año 2015 hasta 2022. Ahora estamos esperando que el Señor nos dé un nuevo destino para poder anunciar su amor”.

¿Cómo fueron esos años en Mongolia? Uno de los hijos recuerda perfectamente los momentos con su padre jugando con el trineo en la nieve: “Se acuerdan con cariño de Mongolia […] la ciudad allí es muy fría y a veces llegamos incluso a -40º grados”.

El padre además subraya como sus hijos fueron “el primer caso de niños occidentales en el colegio público. Nadie estaba preparada para eso y los niños sufrieron bullying. El Señor les ha concedido estar siempre contentos, perdonando y aceptando la realidad”. “La ciudad es realmente exigente: la contaminación, el hielo en las calles durante gran parte del año, a veces escasez de alimentos en los supermercados”, recuerda el padre.

A pesar de todas estas dificultades, la familia Natek Bueno tiene claro que ha sido una alegría “poder anunciar el Evangelio al pueblo mongol, en varios idiomas y poderle decir que el Señor les quiere, que ha dado la vida por ellos, que nos ha liberado y nos ha hecho felices”. “Anunciar el Evangelio en Mongolia es un regalo, porque es un país donde nunca había entrado la Iglesia, no conocen a Cristo para nada y, aun así, es impresionante su acogida”, ha dicho el padre de la familia Natek Bueno que ahora están a la espera para conocer su próximo destino.