Así puedes prepararte para la Semana Santa desde el arrepentimiento y la petición de perdón

El capellán Don Francisco Gabaldón Álvarez nos da las claves para vivir una Semana Santa desde el arrepentimiento, ahora que no podemos confesarnos 

Redacción Religión

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Vivimos una Semana Santa muy especial, donde las estaciones de penitencias de las hermandades y cofradías no realizarse como consecuencia del Estado de Alarma decretado por el Gobierno de España para evitar la propagación del coronavirus. La imposibilidad de salir de casa impide además a los fieles confesarse en esta semana de pasión. Por ello desde COPE.es, conscientes de la situación, hemos recurrido al capellán de las Hermanas Clarisas de La Inmaculada y San Pascual, Don Francisco Gabaldón Álvarez, que nos ha ayudado a realizar un examen de conciencia, un acto de contrición.

"Estamos viviendo estos días santos de una manera insólita y especial. Una Semana Santa que verdaderamente no olvidaremos fácilmente. Son días en los que también la Iglesia nos invita a experimentar la reconciliación. Unos días que estábamos llamados a acercarnos más al Señor. Es verdad que no podemos celebrar de manera habitual el Sacramento de la Penitencia, por las circunstancias excepcionales en las que estamos viviendo en este Estado de Alarma sanitaria, pero debemos de ser conscientes que el Señor siempre nos llama a que supliquemos por el verdadero conocimiento de nuestros pecados, y de su infinita misericordia y lo podemos hacer en casa, en familia, cada uno de manera particular y personalmente, haciendo un examen de consciencia en estos días a la luz de la Palabra de Dios, que nos viene iluminando día tras día. El Señor nos invita a descubrir esa llamada a la conversión, y a creer en el Evangelio.

Recordamos el Miércoles de Ceniza cuando recibíamos ese signo penitencial en este tiempo de Cuaresma, “convertíos y creed en el Evangelio”. Pues el Señor está cerca, y nosotros estamos llamados a vivirlo de una manera intensa. Dios se acerca a los hombres, precisamente para que nosotros nos acerquemos de una manera más profunda a Dios. Sí es verdad que el Sacramento de la Penitencia, a lo largo de toda la historia de la Iglesia, ha tenido un desarrollo. Los primeros cristianos, y en los primeros siglos, se celebraba de manera comunitaria. Es decir, los cristianos reconocían públicamente que eran pecadores, y entraban a formar parte de lo que se llamaba “el orden de los penitentes”. Y en el Jueves Santo se hacía esa gran celebración presidida por el obispo en donde todos los que habían entrado a formar parte del orden de los penitentes eran reconciliados públicamente en la Iglesia para participar en los días santos de la Pascua.

Bien, quizás es una buena forma de descubrir en estos días el reconocernos pecadores de manera comunitaria como Iglesia, cada uno particularmente, pero también de manera común. Así es como especialmente lo podemos hacer en estos días, a la luz de la palabra de Dios, con una breve reflexión de cualquiera de las Lecturas que nos invitan a la conversión, con el Salmo 50 que es un salmo especialmente penitencial, y que nos invita a descubrir la misericordia de Dios. Y después, con unas peticiones, el rezo del Padre Nuestro y esa oración de súplica para que el Señor nos otorgue el perdón de los pecados, y así participar en estos días santos con todo el corazón en la celebración de la Muerte, Pasión y Resurrección de Jesucristo, y entrar así en esa vida nueva que Él nos da. ¡Santa Pascua!".