Desde el Nazismo y la caída del Muro de Berlín a la crisis EEUU-Cuba: el papel del Vaticano en los conflictos
El Vaticano ha jugado un papel esencial en la resolución de conflictos internacionales en el último siglo de nuestra historia, la más cruenta de todas
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El máximo responsable de la diplomacia vaticana, el card. Pietro Parolin, ha sido entrevistado por varios periódicos italianos ((Il Corriere della Sera, La Repubblica, La Stampa e Il Messaggero) y ha afirmado que la Santa Sede está dispuesta a ayudar en las negociaciones entre Rusia y Ucrania.
“La Santa Sede, que en los últimos años ha seguido de manera constante, discreta y con gran atención los acontecimientos en Ucrania, ofreciendo su disposición a facilitar el diálogo con Rusia, está siempre dispuesta a ayudar a las partes a retomar este camino”, ha dicho el card. Parolin.
A lo largo del siglo XX y en el primer tercio del siglo XXI, el papel del Vaticano ha sido esencial para la resolución o mediación de los conflictos, dando grandes frutos, como recuperar las relaciones entre EEUU y Cuba en 2015 o su papel en el Canal de Beagle en la década de los ochenta. Un hecho que demuestra el poder simbólico del Vaticano, que en ocasiones termina por ser más influyente que los negociadores en una mesa entre dos parters.
A continuación, repasamos el papel de la Santa Sede en cuatro diferentes conflictos internacionales acaecidos en el último siglo.
El papel de Pío XI para salvar la vida a miles de judíos durante el Nazismo
Durante los años oscuros de la Alemania Nazi, el Papa Pío XI publicó la encíclica 'Con ardiente preocupación' en la que condenaba la ideología racista y pagana de Adolf Hitler.
“Solamente espíritus superficiales pueden caer en el error de hablar de un Dios nacional, de una religión nacional, y emprender la loca tarea de aprisionar en los límites de un pueblo solo, en la estrechez étnica de una sola raza, a Dios, creador del mundo, rey y legislador de los pueblos, ante cuya grandeza las naciones son como gotas de agua en el caldero”, se puede leer en el texto, poniendo de manifiesto su oposición al Tercer Reich.
Durante su Pontificado, tendió puentes a los judíos durante el régimen nazi. Se estima que la Santa Sede, los nuncios y la Iglesia católica salvaron de la muerte de 740.000 a 850.000 judíos.
La mediación de la Santa Sede en el Canal de Beagle evitó una guerra
Chile y Argentina estuvieron a punto de iniciar una guerra por la soberanía del canal de Beagle entre los años 1978 y 1979. Un litigio limítrofe que consistía en la disputa por la traza oriental del canal y cuya islas fueron motivo de discusión.
El laudo arbitral otorgó aguas navegables en el canal Beagle a ambos países y la mayor parte de las islas y de los derechos oceánicos generados por ellas a Chile, pero el gobierno militar de Jorge Rafael Videla rechazó el fallo, aumentando así las tensiones. Las Fuerzas Armadas se dispusieron a ocupar estas islas, pero la fuerza de Juan Pablo II lo impidió.
La mediación del Pontífice polaco logró entablar conversaciones entre los dos países y los diálogos dieron como fruto el final del conflicto gracias a la firma del Tratado de Paz y Amistad que aún continúa vigente, y que fue firmado en 1984.
La contribución de Juan Pablo II en la caída del Muro de Berlín
Una vez más la intervención de Juan Pablo II se antojó esencial para propiciar la caída del Muro de Berlín en 1989, que suponía la caída del comunismo y la división del mundo en dos. El obispo de Roma intervino en el acercamiento entre Margaret Thatcher y Ronald Reagan, lo cual condujo a la participación de Mijaíl Gorbachov en los diálogos que permitieron culminar con la caída del muro. El mismo líder soviético-ruso Gorbachov, reconoció públicamente que la intervención del Papa polaco fue decisiva en los acontecimientos.
El arzobispo polaco Szczepan Wesoly, comentó que en una conversación privada con Karol Wojtyla, expresaba que “el comunismo no tiene nada más que decir, ni en filosofía, economía, sociología, ni en los otros planes de actividad. Solo que se sentía protegido por la armada rusa, que tenía al pueblo bajo su control. Juan Pablo II sabía que este sistema estaba muerto, por eso, su primer mensaje cuando fue elegido Papa fue 'no tengan miedo’’.
Por ello, en su Polonia natal, jugó un papel importante en la revolución que vivió el país a finales de los ochenta, ejerciendo presión y activismo en la búsqueda de mayores libertades en el país centroeuropeo.
El Papa Francisco, clave en la restauración de las relaciones entre EEUU y Cuba
Tras medio siglo de desencuentros y sin lazos, EEUU y Cuba recuperaron las relaciones, gracias a la mediación del Papa argentino. Bergoglio remitió una carta tanto a Raúl Castro como a Barack Obama, con el objetivo de resolver problemas humanitarios, relacionados especialmente con los presos políticos.
El 23 de septiembre de 2015 Obama, en su discurso durante la ceremonia oficial de bienvenida al Pontífice en la Casa Blanca, mostró su agradecimiento al Sucesor de Pedro por esta labor de acercamiento entre el territorio caribeño y el gigante norteamericano: “Santo Padre, estamos agradecidos por su inestimable apoyo a nuestro nuevo comienzo con el pueblo cubano, que ofrece la promesa de mejores relaciones entre nuestros países, una mayor cooperación en todo el continente y una vida mejor para el pueblo cubano”, manifestó.
Fruto de su gestión en la crisis, se logró que algunos países acogieran a prisioneros de Guantánamo, en el intento de Obama por cumplir la promesa de cerrar la cárcel cubana.