Francisco encomienda a la Virgen al Papa Benedicto XVI: "Le acompañe en su paso desde este mundo hacia Dios"
Durante el Ángelus, el Papa ha pedido unirse "todos juntos, con un único corazón y una única alma, al dar gracias a Dios por el don de este fiel servidor del Evangelio"
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Al principio del Ángelus de este domingo, 1 de enero 2023, el Papa Francisco hizo referencia al fallecimiento del Papa emérito Benedicto XVI: “El inicio de un nuevo año está encomendado a María Santísima, que hoy celebramos como Madre de Dios. En estas horas invocamos su intercesión en particular para el Papa emérito Benedicto XVI, que ayer por la mañana dejó este mundo”.
Asimismo, Francisco ha pedido unirnos “todos juntos, con un único corazón y una única alma, al dar gracias a Dios por el don de este fiel servidor del Evangelio y de la Iglesia”.
Antes del Ángelus, el Papa Francisco había encomendado este domingo, 1 de enero, a la Virgen María al "amado" papa emérito Benedicto XVI, su predecesor y fallecido ayer sábado a los 95 años, durante su homilía por la primera misa del año en la basílica de San Pedro.
"Hoy encomendamos a la Madre Santísima el amado papa emérito Benedicto XVI para que le acompañe en su paso desde este mundo hacia Dios", dijo el pontífice argentino en esta eucaristía, en su segunda reacción pública sobre el fallecimiento de Joseph Ratzinger. Francisco, que fue elegido en 2013 tras la histórica renuncia de este al pontificado, ayer expresó su gratitud por su servicio.
"Hablando de gentileza, en este momento, el pensamiento va espontáneamente al queridísimo papa emérito Benedicto XVI, que esta mañana nos ha dejado. Con conmoción, recordamos su personalidad tan noble, tan gentil", señaló entonces.
Y agregó: "Sentimos en el corazón mucha gratitud, gratitud a Dios por haberlo donado a la Iglesia y al mundo, y gratitud a él por todo el bien que cumplió y, sobre todo, por su testimonio de fe y de oración, especialmente en estos últimos años de vida retirada". Porque, alegó, "solo Dios conoce el valor y la fuerza de su intercesión, de sus sacrificios ofrecidos por el bien de la Iglesia".
Benedicto XVI murió ayer por la mañana en el monasterio vaticano en el que residía retirado desde su renuncia al ministerio petrino. Su capilla ardiente abrirá mañana lunes en la basílica vaticana y los fieles podrán despedirle hasta el jueves, cuando Francisco presidirá su funeral en la plaza de San Pedro antes de su inhumación en la cripta del templo.