Los migrantes como "misioneros de esperanza" en la próxima Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado

El Papa Francisco presenta el lema de la 111ª Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado 2025 y destaca su “valentía, tenacidad y esperanza”

 

 

Redacción Religión

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El Papa Francisco ha elegido el lema “Migrantes, misioneros de esperanza” para la 111ª Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado, que este año se celebrará el 4 y 5 de octubre de 2025 en el contexto del Jubileo del Migrante y del Mundo Misionero.  

Con este tema, Francisco quiere destacar “la valentía y la tenacidad” de los migrantes y refugiados, quienes, a pesar de las dificultades, “encarnan la esperanza en el futuro”. Su travesía, muchas veces marcada por el sufrimiento y la incertidumbre, está impulsada por el anhelo de una vida mejor y por la confianza en Dios.

El mensaje del Papa subraya que los migrantes no solo buscan seguridad y oportunidades, sino que también pueden ser “mensajeros de esperanza en las comunidades que los acogen. A menudo, su presencia revitaliza la fe y favorece el diálogo interreligioso, promoviendo valores comunes de solidaridad, fraternidad y respeto mutuo”.

Tienen la esperanza de alcanzar la felicidad incluso más allá de las fronteras, la esperanza que los lleva a confiar totalmente en Dios

Papa Francisco

Presentación del lema de la 111ª Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado

Asimismo, el tema de la jornada recuerda a la Iglesia su propia vocación peregrina y señala que el destino final del ser humano no es un lugar en la tierra, sino “la Patria futura en el Reino de Dios”: “La esperanza es la actitud fundamental que nos sostiene en el camino. No consiste en esperar con resignación, sino en lanzarse con entusiasmo hacia la vida real, que conduce mucho más allá del estrecho perímetro individual”

A diferencia de años anteriores, cuando la jornada se conmemoraba el último domingo de septiembre, en 2025 se ha trasladado al 4 y 5 de octubre, para que coincida con las celebraciones del Jubileo del Migrante y del Mundo Misionero.

No obstante, en muchas diócesis se seguirá haciendo alusión a esta jornada el 28 de septiembre y se integrará en la liturgia del día, con oraciones y reflexiones específicas sobre la realidad de los migrantes y refugiados.