El Papa Francisco invita a "amar la pobreza" en su encuentro con religiosos en Timor Oriental

En la tercera etapa de su viaje a Asia y Oceanía, el Papa Francisco se ha reunido con los obispos y religiosos de Timor Oriental en la catedral de María Inmaculada. Allí le esperaban 347 sacerdotes, 1.038 religiosas, y los representantes de 320 escuelas, 66 parroquias, y 51 centros entre los que encuentran hospitales y residencias de ancianos y discapacitados. 

Una de ellas era la religiosa María Cecilia Andereggen, hermana de la Congregación Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús. La hna. María Cecilia es la única misionera argentina en el país, tiene 37 años y lleva 8 años viviendo en Timor Oriental. Vive en Santete, en las montañas, donde trabaja en una escuela rural: "ahora estamos esperando al Papa Francisco, llevamos desde antes de las 5 de la mañana con mucha ilusión, el pueblo está entusiasmado, quieren ver al Papa porque dicen que verlo es como ver a Jesús".

Además, la hna. Andereggen ha añadido que "para nosotros que venga es un signo, como una manera de decir que la iglesia es de los pobres y para los pobres y que venga a un país entre los más pobres, esto nos mueve a estar mas cerca de ellos".

"amen la pobreza y no se dejen tentar por la soberbia y el poder"

En su discurso, el Pontífice les ha pedido que "amen la pobreza" y no se dejen tentar por la "soberbia y el poder". "Gracias por estar en los confines", ha señalado el Pontífice, que ha elegido el español para sus discursos en este país, donde la segunda lengua oficial es el portugués.

Asimismo, ha explicado que "el Evangelio está poblado de personas que se hallan en los márgenes, en los confines, pero que son convocados por Jesús y se vuelven protagonistas de la esperanza". También ha insistido en que, "aunque los habitantes les llaman 'Amu', que aquí es el título más importante y significa 'señor', esto no debe hacerlos sentirse superiores al pueblo, ni llevarlos a la tentación de la soberbia y del poder; no debe conducirlos a pensar en su ministerio como un prestigio social".

En este sentido, les ha animado a estar cerca de los más necesitados: "Amen la pobreza como a su esposa, el ejemplo tiene que ser el cura pobre" y les ha pedido que respeten la cultura local, pero que "debe ser purificada siempre a la luz del Evangelio y de la doctrina de la Iglesia. Purificarla de formas y tradiciones arcaicas y, a veces, supersticiosas".

"las mujeres son lo mas importante de la Iglesia"

También, les ha animado a compartir "el perfume del Evangelio" que "necesita ser difundido contra todo lo que humilla, degrada e incluso destruye la vida humana; contra las plagas que generan vacío interior y sufrimiento, como son el alcoholismo, la violencia y la falta de respeto a la dignidad de la mujer".

Por último, ha agregado que "las mujeres son lo mas importante de la Iglesia, porque cuidan de los mas necesitados. Vengo de visitar un centro que se ocupa de los más necesitados y más pobres... Hermanas, sean madres del pueblo, anímense a parir comunidades".