El Papa Francisco pide al régimen de Venezuela "respeto a la vida, a la dignidad y a los derechos" de sus ciudadanos
En su tradicional discurso de inicio de año al cuerpo diplomático, el Pontífice ha repasado los conflictos que asolan el mundo, poniendo el foco en Tierra Santa, Ucrania o países donde los cristianos son perseguidos
Publicado el
3 min lectura
El Papa Francisco ha reclamado que se inicien las negociaciones en Venezuela en aras del bien común del país, pidiendo que se respeten los derechos de todos los ciudadanos venezolano, incluidos los arrestados en los últimos meses tras el proceso electoral del pasado verano.
Es uno de los territorios en conflicto donde el Pontífice ha puesto el foco en su tradicional discurso de inicio de año a los 184 embajadores de los países acreditados ante la Santa Sede.
El Santo Padre ha asegurado que en Venezuela la situación podrá normalizarse “con la adhesión sincera a los valores de la verdad, de la justicia y de la libertad, a través del respeto a la vida, a la dignidad y a los derechos de cada persona, incluidos los de quienes han sido arrestados a causa de los sucesos de los últimos meses".
Sobre Sudamérica, el Papa también ha hecho referencia a la preocupante “situación política, social y económica que vive Bolivia y sobre Colombia desea que se supere “la multiplicidad de los conflictos que lastiman al país desde hace demasiado tiempo".
Preocupación del Papa por Nicaragua
Sin abandonar el continente americano, el obispo de Roma ha reafirmado el compromiso del Vaticano por mantener un “diálogo respetuoso y constructivo” para contribuir a normalizar la difícil situación que viven los cristianos en Nicaragua.
En este sentido, Francisco ha mostrado su preocupación “por las medidas adoptadas con respecto a personas e instituciones de la Iglesia" por parte del régimen de Daniel Ortega, que ha tenido como consecuencia los arrestos y expulsiones del país sacerdotes y obispos, así como interrumpido las relaciones diplomáticas.
Francisco ha instado a los embajadores a que “a todos sean garantizados adecuadamente la libertad religiosa y los demás derechos fundamentales".
"Efectivamente, no hay verdadera paz si no viene garantizada también la libertad religiosa, que implica el respeto a la conciencia de los individuos y a la posibilidad de manifestar públicamente la propia fe y pertenencia a una comunidad", ha agregado.
El Papa reclama un alto en fuego en Tierra Santa
En su discurso al cuerpo diplomático, el Sucesor de Pedro volvía a reclamar un alto en fuego en Tierra Santa y la liberación de los rehenes israelíes en Gaza. “Hay una situación humanitaria gravísima e innoble", ha lamentado el Papa, quien ha pedido que “la población palestina reciba todas las ayudas necesarias".
En este punto, Jorge Mario Bergoglio ha deseado que se reconstruyan los puentes de diálogo entre Israel y Palestina con el objetivo de alcanzar la paz y convivencia en las generaciones venideras: “Que Jerusalén sea la ciudad del encuentro, donde convivan en armonía y respeto cristianos, judíos y musulmanes", ha comentado.
Francisco, sobre la guerra de Ucrania: “Se necesita todavía mucho trabajo para la paz”
Tampoco ha faltado un mensaje para “la afligida Ucrania”. En este sentido, ha demandado a la comunidad internacional que ponga fin a un conflicto que se inició hace casi tres años.
El Papa valora que haya “signos alentadores” que vislumbren el final de la guerra, pero reconoce que “se necesita todavía mucho trabajo para poner en pie las condiciones de una paz justa y duradera, y para sanar las heridas infringidas por la agresión".
"No podemos aceptar de ningún modo que se bombardeen poblaciones civiles o se ataquen infraestructuras vitales para la subsistencia. No podemos aceptar el ver morir de frío a los niños porque se han destruido los hospitales y ha sido dañada la red energética de un país", ha enfatizado.
Las palabras de aliento del Papa a los cristianos perseguidos
El Pontífice ha tenido unas palabras de aliento para los cristianos perseguidos en numerosos rincones del planeta, refiriéndose a países como Siria, “que después de años de guerra y devastación, parece que está recorriendo un camino de estabilización".
Francisco también ha citado otros conflictos en el mundo como "en Sudán, en el Sahel, en el Cuerno de África, en Mozambique, donde hay una gran crisis política en curso, y en las regiones orientales de la República Democrática del Congo, donde la población se ve afectada por graves deficiencias sanitarias y humanitarias, agravadas a veces por la plaga del terrorismo".
También mencionó a Birmania (Myanmar), "donde la población sufre grandemente a causa de los continuos enfrentamientos armados que obligan a la gente a huir de sus casas y a vivir en el miedo".