El obispo auxiliar de Kiev: "Esperamos la paz, Dios no quiere esta sangre"

Oleksandr Jazlovec'kyj ha valorado la ayuda de la Iglesia a las personas que han quedado en Ucrania y que viven en medio del hambre y el miedo

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Redacción Religión

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Eo obispo auxiliar de Kiev, Oleksandr Jazlovec'kyj ha agradecido al al Papa sus gestos y palabras: "Se ha convertido en el padre de todas las confesiones. Se le escucha y respeta mucho". En una entrevista a Radio Vaticana, el obispo ha asegurado que "las palabras pronunciadas por el Santo Padre y la bandera procedente de Bucha, desplegada en el Aula Pablo VI, fueron un gran alivio para todos nosotros".

"La posición del Papa es conocida en todo el mundo, incluso en Ucrania, que es un país de mayoría ortodoxa. El Papa Francisco es escuchado y muy respetado por lo que hace y lo que dice desde que estalló esta guerra. Esto también se puede ver en las redes sociales donde , ha expresado, hay muchos ucranianos que publican fotos del Santo Padre".

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Una vez más con la mirada puesta en la última audiencia general, el prelado subrayó "el abrazo" del Papa a un grupo de niños que huyeron de Ucrania y fueron acogidos en Italia. "Fue conmovedor. Especialmente el pequeño que estaba saltando... Agradezco a Dios que hayan conseguido escapar, acogidos en Italia o en otros países. Muchos no consiguieron salir y dicen que murieron más de 200 niños. Más aún son los que viven en el hambre y el miedo o sin padres. Hoy mismo he leído la carta que un niño de 9 años ha escrito para su madre muerta en el coche. Él se salvó en el hospital... y escribió una pequeña carta en la que agradecía mucho a su madre y le decía: 'Deseo que estés en el cielo, nos vemos en el cielo'".

En este contexto, la Iglesia está cerca de estas personas. "Poco a poco también estamos intentando hacer algo con los que se quedaron en Kiev-ytomyr, una de las tres diócesis más dañadas por los rusos. Buscamos llevar ayuda a las familias, a las pocas que quedan. Miro a mi alrededor en las comunidades parroquiales o en las iglesias durante la misa, están llenas pero hay pocos niños. Gracias a Dios que lograron escapar", asegura el prelado.