El Papa denuncia el "invierno demógrafico" que viven muchos países: "Vivimos en una época de notoria orfandad"
Francisco en su catequesis ha exhortado a las instituciones a facilitar los procesos de adopción, de modo que el sueño de los niños que necesitan una familia se haga realidad
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Este miércoles, 5 de enero, el Papa continuó su catequesis sobre San José y habló de él como padre putativo y no biológico de Jesús. Francisco habló además de la responsabilidad de ser padres y de la belleza de acoger a un niño que necesita un hogar, para que nadie se sienta privado de un vínculo de amor familiar.
“Nadie hace padre, sino que se hace. Y no se hace sólo por traer un hijo al mundo, sino por hacerse cargo de él responsablemente. Todas las veces que alguien asume la responsabilidad de la vida de otro, en cierto sentido ejercita la paternidad respecto a él” recordó el Papa citando la Carta apostólica Patris Corde.
Abrirse al camino de la adopción
Y esto, dijo el Santo Padre, fue lo que hizo José al reconocer jurídicamente y darle el nombre de Jesús, que significa “El Señor salva”, cumpliendo así el mandato de Dios anunciado en sueños por el Ángel: “Porque salvará a su pueblo de sus pecados" (Mt 1,21). En la antigüedad, explicó el Pontífice, el nombre era la sustancia de la identidad de una persona. Cambiar de nombre significaba cambiarse a sí mismo, pero, sobre todo, dar un nombre a alguien o a algo significaba afirmar la propia autoridad sobre lo nombrado.
“Pienso en particular en todos aquellos que se abren a la acoger la vida a través del camino de la adopción, que es una actitud generosa, bella. José nos muestra que este tipo de vínculo no es secundario, no es un expediente. Este tipo de elección es una de las formas más sublimes de amor y de paternidad y maternidad” dijo el Santo Padre.
No es asumir un “riesgo” es acoger niños
Francisco advirtió que no hay que tener miedo de elegir el camino de la adopción porque no se trata de asumir un “riesgo” sino de “acoger a niños”. “¡Cuántos niños en el mundo esperan que alguien cuide de ellos! Y cuántos cónyuges desean ser padres y madres, pero no lo consiguen por motivos biológicos; o, incluso teniendo ya hijos, quieren compartir el afecto de su familia con los que se han quedado sin ellos” afirmó el Santo Padre este miércoles
En este sentido, el Papa reflexionó sobre la paternidad en la actualidad: “Vivimos en una época de notoria orfandad”. El Pontífice afirmó que nuestra civilización es “un poco huérfana” y se nota el sentimiento de orfandad que tanto duele.
Egoísmo e invierno demográfico
“Hoy, además, con la orfandad, hay un cierto egoísmo”, subrayó el Papa al referirse al “invierno demográfico” que se vive en algunos países occidentales. El Santo Padre lamentó que muchas parejas prefieren no tener hijos o al límite uno nada más y esta negación de la paternidad y de la maternidad “nos quita humanidad, la civilización se vuelve más vieja y sin humanidad”. Por ello, pidió a San José un “despertar las conciencias” sobre la paternidad y la maternidad que son la plenitud de la vida de una persona.
“Es cierto que existe la paternidad espiritual para los que se consagran a Dios y la maternidad espiritual; pero los que viven en el mundo y se casan, piensan en tener hijos, en dar la vida, porque son ellos los que te cerrarán los ojos, los que te quitarán para el futuro. Y también, si no puedes tener hijos, piensa en la adopción. Es un riesgo, sí: tener un hijo siempre es un riesgo, ya sea natural o adoptado. Pero más arriesgado es no tenerlo. Más arriesgado es negar la paternidad, negar la maternidad, ya sea real o espiritual”.
Simplificar el procedimiento de adopción
Al insistir en la belleza de la adopción, el Papa exhortó a las instituciones que se ocupan de las adopciones a estar siempre dispuestas ayudar, “controlando seriamente” la idoneidad de los candidatos, pero también “simplificando el procedimiento necesario”, para que el “sueño de tantos niños que necesitan una familia, y de tantos cónyuges que desean entregarles su amor, pueda hacerse realidad”.