El Papa Francisco evoluciona favorablemente y "no precisa de respiración asistida" tras su operación

Buenas noticias las que llegan desde el Vaticano del Papa Francisco, que se encuentra, según el comunicado, en buenas condiciones y no precisa de respiración asistida tras ser intervenido quirúrgicamente este domingo de una estenosis diverticular sintomática del colon.

El Santo Padre tendrá que permanecer ingresado en el hospital Policlínico Gemelli de Roma una semana, siempre y cuando no se produzcan complicaciones.

La nota de prensa de la Santa Sede remarca también que la operación se prolongó por un periodo de tres horas, extirpándole el lado izquierdo del colon. De esta manera, el Pontífice ha reaccionado bien a la operación realizada bajo anestesia general y llevada a cabo por el profesor Sergio Alfieri, con la asistencia del profesor Luigi Sofo, el doctor Antonio Tortorelli y la doctora Roberta Menghi.

Estenosis diverticular sintomática del colon

Se trata de un trastorno que no reviste gravedad, y que afecta especialmente a personas de más de sesenta años (el Papa tiene 84 primaveras). Se trata de una alteración que implica al sistema digestivo, formando bolsas en el intestino (en la zona del colon), lo que conocemos como divertículos. Estos divertículos se inflaman, llegando a infectarse.

Pese a que no es una patología grave, es bastante molesta, manifestándose especialmente con dolores en la parte inferior izquierda del abdomen, y que empeoran después de las comidas. Unos dolores estomacales que pueden ir acompañados de vómitos, fiebre, estreñimiento o sangre en las heces entre otros síntomas.

También conviene destacar que otros pacientes no presentan síntomas, por lo que son conocedores del trastorno a través de pruebas médicas rutinarias o por otros motivos. No ha sido el caso de Francisco, que sí manifestó molestias abdominales y un poco de fiebre.

Según el grado en el que se encuentre la diverticulitis, el tratamiento será diferente. En el caso del Sucesor de Pedro, ha sido necesaria la cirugía en el hospital Gemelli de Roma al estar más avanzado. En un primer momento no procedería pasar por el quirófano, siendo suficiente antibióticos y dieta blanda, además de unos días de reposo.