El Papa Francisco pide aprovechar el tiempo de vacaciones “para detenernos y ponernos en escucha de Jesús”

El Papa Francisco ha realizado este domingo el rezo del Ángelus desde la ventana del Palacio Apostólico del Vaticano antes centenares de fieles. El Santo Padre ha hecho especial énfasis en aprovechar este tiempo de vacaciones para “detenernos y ponernos en escucha de Jesús. Hoy cuesta cada vez más encontrar momentos libres para meditar. Para muchas personas los ritmos de trabajo son frenéticos, extenuantes. El periodo de verano puede ser valioso también para abrir el Evangelio y leerlo lentamente, sin prisa. Dejémonos interpelar por esas páginas, preguntándonos cómo está yendo nuestra vida, si está en línea con lo que dice Jesús”.

Respecto al Evangelio de la Liturgia de este domingo, se ha centrado en narrar la historia de Marta y María, dos hermanas que ofrecen hospitalidad a Jesús en su casa. María se sienta a los pies de Jesús para escucharle, mientras que Marta se dirige a Jesús para que obligue a su hermana a ayudarla en la acogida de los huéspedes. Sorprendentemente Jesús le responde: “Marta, Marta, te preocupas y te agitas por muchas cosas; y hay necesidad de pocas, o mejor, de una sola. María ha elegido la parte buena, que no le será quitada”.

El Santo Padre ha explicado que “la ‘filosofía’ de Marta parece esta: primero el deber, después el placer. La hospitalidad, de hecho, no está hecha de bonitas palabras, sino que exige poner la mano en los fogones, ocuparse de todo lo necesario para que el huésped se sienta bien acogido. Esto, Jesús lo sabe muy bien. Y de hecho reconoce el esfuerzo de Marta. Pero quiere hacerle entender que hay un orden de prioridad nuevo, diferente al que hasta ahora había seguido. María ha intuido que hay una “parte buena” a la que hay que dar el primer lugar. Todo lo demás viene después, como un arroyo de agua que brota de la fuente”.

El resto vendrá después

Francisco ha hecho hincapié en que “la palabra de Jesús no es abstracta, es una enseñanza que toca y plasma la vida, la cambia, la libera de las opacidades del mal, satisface e infunde una alegría que no pasa: es la parte buena. Por eso María le da el primer lugar: se detiene y escucha. El resto vendrá después”.

Ponernos en escucha de Jesús

Por esto mismo, el Papa pide pide aprovechar el tiempo de vacaciones “para detenernos y ponernos en escucha de Jesús”. La reflexión del Pontífice va porque “cada vez cuesta más encontrar momentos libres para meditar. Para muchas personas los ritmos de trabajo son frenéticos, extenuantes. El periodo de verano puede ser valioso también para abrir el Evangelio y leerlo lentamente, sin prisa. Dejémonos interpelar por esas páginas, preguntándonos cómo está yendo nuestra vida, si está en línea con lo que dice Jesús”.