Católicos y científicos: Enrique Balcells, por Alfonso V. Carrascosa, científico del CSIC

Católicos y científicos: Enrique Balcells, por Alfonso V. Carrascosa, científico del CSIC

Alfonso V. Carrascosa

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Católicos y científicos: Enrique Balcells, por Alfonso V. Carrascosa, científico del CSIC

Todavía en el entorno del 5 de junio, Día Mundial del Medio Ambiente, presentamos científicos de la rama de la ecología, que además han pertenecido a la Iglesia Católica.

Enrique Balcells Rocamora (1922-2007) fue un científico del CSIC dedicado a la investigación en ecología, que es la ciencia que estudia a los seres vivos en relación con el entorno físico. No hay que confundir con la ideología ecologista, aunque guarde alguna relación. Celso Arévalo, pionero de la ecología española, y Jose Mª Albareda, su institucionalizador, compartieron con Balcells sus profundas y arraigadas convicciones religiosas, dando así muestra de que razón y fé, o ciencia y religión, conviven en perfecta armonía en quienes ambos modos de conocimiento no buscan el enfrentamiento sino la complementación.

Terminó bachillerato poco después de concluir la guerra civil. Decidió entonces dedicarse al estudio de la naturaleza. Se licenció en Ciencias Naturales en 1943, obteniendo nota media de Notable y en el Examen de Grado Sobresaliente. En 1950 obtuvo su Doctorado en Ciencias por la Universidad de Madrid, en el que mostró su habilidad para el dibujo naturalista. Al año siguiente, tras superar un concurso-oposición, fue nombrado Colaborador Científico del CSIC. Pensionado por el CSIC trabajó en varias ocasiones en el Museo de Historia Natural de Ginebra y, durante los años 1954 y 1955 en el Departamento de Anatomía Comparada de la Facultad de Ciencias de La Sorbona, donde comenzó a interesarse por la investigación por la anatomía de los vertebrados con enfoque ecológico. En 1951 publicó un trabajo sobre crustáceos de agua dulce con el también católico y científico Ramón Margalef, y más tarde se especializó en zoogeografía.

Fue uno de los fundadores de la bioespeleología moderna, en parte por sus estudios de murciélagos. Jose Mª Albareda le encomendó por su ya gran prestigio la creación del Centro Pirenaico de Biología Experimental del CSIC, que fundó en Jaca en 1963. Simultaneó su actividad científica con la docente y en 1983 comenzó a dirigir el Instituto Pirenaico de Ecología (CSIC), contribuyendo de manera definitiva a la institucionalización de dicha disciplina. Dirigió la revista Pirineos, poniéndola al día, aumentando el nivel de los trabajos, y las Publicaciones del Centro pirenaico de Biología experimental.

El CSIC le promovió en 1971 a Profesor de Investigación y ocupó cargos de gestión en él. También lo hizo en comités internacionales. Su gran cantidad de estudios científicos contribuyó a la recuperación de razas de ganadería y a la preservación de los Pirineos como ecosistema.

En su nota necrológica sus autores no dejan lugar a duda cuando comentan : "Aunque él nunca lo pregonase, Balcells era un hombre religioso, por formación y por convicción, devoto católico, de misa y comunión diarias. Su posición religiosa podía considerarse próxima al Opus Dei, congregación de la que era simpatizante ?Tampoco puede decirse en modo alguno que la posición religiosa de Balcells haya tenido que ver con la elección de sus colaboradores. Entre sus alumnos los había religiosos, agnósticos y hasta abiertamente antirreligiosos?por lo que nosotros sabemos, jamás reclutó, discriminó ni descartó a nadie por afinidad o diferencia religiosa".

REFERENCIAS

Notas necrológicas. ENRIQUE BALCELLS ROCAMORA. (Barcelona 1922-Jaca 2007). Juan Pablo Martínez Rica* y Luis Villar Pérez** Instituto Pirenaico de Ecología, CSIC. *Apdo. 202. 50080 Zaragoza. ** Apartado 64. 22700 Jaca (Huesca). Bol. R. Soc. Esp. Hist. Nat. Actas, 105, 2008. http://wzar.unizar.es/murero/activos/pdfs/2008_Carls&Linan_Bol_Real_Soc_105.pdf