Católicos y científicos: Simón de Rojas Clemente, por Alfonso V. Carrascosa, científico del CSIC

Católicos y científicos: Simón de Rojas Clemente, por Alfonso V. Carrascosa, científico del CSIC

Alfonso V. Carrascosa

Publicado el - Actualizado

3 min lectura

Católicos y científicos: Simón de Rojas Clemente, por Alfonso V. Carrascosa, científico del CSIC

Simón de Rojas Clemente y Rubio (1777-1827) se llamó así por nacer el día del beato Simón de Rojas, religioso Trinitario Calzado del siglo XVI, fue un ilustrado español que llegó a ser diputado en Cortes y director del Real Jardín Botánico de Madrid, donde tiene la escultura en la foto. Hay abundante información sobre él en internet. Como a los demás ilustrados católicos, el laicismo les ha podado su faceta de creyentes. Simón de Rojas era un científico católico.

Hizo carrera eclesiástica, por tanto recibió religión en la escuela, en un seminario. Tras acabar los estudios de filosofía, emprendió los de teología, y él mismo cuenta que disfrutó como un enano estudiando a Francisco Suárez y a santo Tomás, logrando doctorarse en Teología. También aprendió idiomas, incluidos árabe y hebreo, impartiendo clase de este último. Aprendió de geología, zoología, pero sobre todo botánica, nada menos que del más grande botánico español, el cura católico Cavanilles. Además, sus conocimientos de botánico buscó que generasen aplicaciones, y las publicó en el "Semanario de agricultura y Artes, dirigido a párrocos", para transferir el conocimiento a los campesinos a través de cauces eclesiales, semanario también fundado por un cura católico, el Abate Juan Melón. En su obra "Ensayo sobre las variedades de vid que vegetan en Andalucía" dejó simón de Rojas establecidas las bases de la ampelografía o ciencia que estudia las variedades de vid y el modo de diferenciarlas, diseñando métodos hasta hoy vigentes en todo el mundo. Tenía un profundo amor a su pueblo natal, Titaguas (Valencia) y escribió la Historia Eclesiástica del mismo. Cuentan los cronistas de la época que era de sencillez en el vestir, salvo el Jueves y el Viernes Santo en los que se ponía de etiqueta.

Aunque fue diputado en Cortes nunca le interesó mucho la actividad política. En su testamento da cumplida cuenta de su catolicidad, al encomendarse a las oraciones de los demás, muriendo cristianamente con el auxilio de los sacramentos de la confesión y el Viático. Las exequias se celebraron en la Parroquia de San Sebastián de Madrid. En su testamento, además de profesión de fe católica deja a discreción de sus testamentarios las misas en sufragio que por él se han de celebrar, y deja una parte de sus bienes para que sea repartida entre los pobres de su parroquia de Titaguas. Entre sus testamentarios, el Abate Juan antonio Melón, y su sobrino también cura Ignacio Clemente Lázaro. Otro descendiente suyo también cura, Cándido Herrero conservaría sus documentos, gracias a los cuales hoy nos hacemos una idea de la magnitud del personaje. Iglesia y Ciencia juntas una vez más, y sin problemas.

"Otro descendiente suyo también cura, Cándido Herrero conservaría sus documentos, gracias a los cuales hoy nos hacemos una idea de la magnitud del personaje. Presidía su despacho una efigie de santa Teresa de Jesús, su santa favorita, de la cual celebramos ahora el quinto centenario. Iglesia y Ciencia juntas una vez más, y sin problemas".

*S. Rubio (199). Biografía del sabio naturalista y orientalista valenciano D. Simón de rojas Clemente y Rubio. Ed. Samuel Rubio, Valencia.