La Pascua en los prefacios de la Misa, por Jesús de las Heras

La Pascua en los prefacios de la Misa, por Jesús de las Heras

Jesús de las Heras

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La Pascua en los prefacios de la Misa, por Jesús de las Heras

"Muriendo destruyó nuestra muerte y resucitando restauró la vida"

El Prefacio es la parte de la plegaria eucarística de la Santa Misa, previa a la consagración, en la que el sacerdote, en nombre todo el pueblo santo, glorifica a Dios Padre y le da las gracias por toda la obra de la salvación o por algunos de sus aspectos particulares, según las variantes del día, fiesta o tiempo litúrgico.

En el actual Misal Romano hay cinco Prefacios generales de Pascua. Dos son sus grandes enseñanzas: la victoria de Jesucristo sobre la muerte y el anuncio y prenda de esta victoria también para nosotros. Dicho de otra manera: la Pascua no es la Pascua de Cristo sino que desde ella lo es para nosotros.

La lectura y meditación de estos cinco prefacios pascuales nos muestra espléndida y hermosamente la identidad del Pascua, que ahora desglosamos ya agrupamos -algunos de ellos podrían repetirse en su emplazamiento en razón de la riqueza y hondura de su contenido- en los siguientes tres bloques temáticos:

1.- ¿Quién es Jesús Resucitado?

? El verdadero Cordero que quitó el pecado del mundo.

? Es sacerdote, víctima y altar.

? El no cesa de ofrecerse por nosotros, de interceder por todos ante ti.

? Inmolado, ya no vuelve a morir; sacrificado, vive para siempre.

2.- ¿En qué consistió su resurrección?

? Muriendo destruyó nuestra muerte y resucitando restauró la vida.

? En su muerte, nuestra muerte ha sido vencida y en su resurrección todos hemos resucitado.

? Con la inmolación de su cuerpo en la cruz, dio pleno cumplimiento a lo que anunciaban los sacrificios de la antigua alianza.

3.- ¿Cuáles son para nosotros los efectos de su resurrección?

? Por El los hijos de la luz amanecen a la vida eterna, los creyentes atraviesan los umbrales del reino de los cielo.

? En El fue demolida nuestra antigua miseria, reconstruido cuanto estaba derrumbado y renovada en plenitud de la salvación.

? Se ofreció a sí mismo por nuestra salvación.