Paz, misericordia, evangelización y educación religiosa, reclamos para 2017 ? editorial Ecclesia
Madrid - Publicado el - Actualizado
4 min lectura
Paz, misericordia, evangelización y educación religiosa, reclamos para 2017 ? editorial Ecclesia
El año 2017 ha comenzado en nuestro mundo bajo la reiterada amenaza y sombra letal de terrorismo de matriz yihadista (ver página 52), con episodios en Turquía, en dos ocasiones, en Irak y en Jerusalén. El Papa, tanto en su mensaje para la Jornada Mundial de Oración por la Paz del 1 de enero como en su discurso del 9 de enero a los embajadores acreditados ante la Santa Sede (página 47), ha vuelto a denunciar estas situaciones y a llamar a construir entre todos una cultura de la paz basada en la no violencia como estilo de vida y de acción política.
También Francisco, de nuevo con sus gestos y decisiones, ahora a propósito de las heladas en Roma (página 49), ha situado la misericordia y su ejercicio concreto en el corazón de la preocupación, de la sensibilización y de la movilización de los cristianos y de las personas de buena voluntad. Y es que, como la carta apostólica Misericordia et misera nos señala y como ya ha reflexionado en distintas ocasiones ecclesia, el jubileo de la misericordia concluyó, pero la misericordia jamás puede concluir en la vida y en la misión de la Iglesia.
Un tercer reto para nuestra Iglesia en 2017 habrá de seguir siendo la renovada y acuciante toma de conciencia de la gran y grave secularización y descristianización que cada día se experimenta más en tantas partes de la humanidad, muy singularmente en Occidente. Y como nuestra, remitimos al primer párrafo de la página 22 de ecclesia de hoy. Estos datos, junto a otros muchos, no nos pueden dejar indiferentes o anestesiados. No se trata de querer ver la botella medio llena o medio vacía? Son una realidad que debemos asumir e intentar superar cuanto antes, aunando con fidelidad la doble, única e intrínsecamente unida dimensión del Evangelio: amor y verdad. Lo dijimos en nuestro anterior comentario Editorial: ¡claro que hay que reformar la Iglesia!, pero esta reforma solo es posible desde la reforma de las personas y desde la fidelidad a la voluntad de Jesucristo.
En relación ya con la Iglesia en España, en los últimos días de 2016, en entrevista a la Agencia Europa Press, el secretario general de la CEE fue preguntado entre otros temas por el presente y el futuro de la clase de Religión Católica, máxime teniendo en cuenta la voluntad de PP, PSOE y C?s de elaborar antes del próximo verano un Pacto Escolar de Estado (ecclesia, número 3.860, páginas 5 y 7). En sus declaraciones, Gil Tamayo comenzó subrayando que la afluencia de la Iglesia "al Pacto Educativo no lo es solo en relación a la clase de Religión", la cual, en ningún caso, "puede ser usada como un pim pam pum político", sino que también "la clase de Religión es una derivada de la consideración del hecho religioso en la sociedad democrática y el derecho de los padres a la educación en libertad de sus hijos conforme a sus convicciones".
En cualquier caso, los obispos quieren que esta materia se respete en el Pacto Educativo anunciado por el ministro de Educación, quien precisamente los convocó el pasado mes de octubre, cuando aún estaba en funciones, para conocer su opinión sobre el mismo. A la espera de otro futuro encuentro, la CEE está estableciendo contactos con las organizaciones con presencia en el ámbito educativo de inspiración cristiana ?asociaciones de profesores de Religión, Escuelas Católicas, CONCAPA??, con el objetivo de crear una mesa de unidad eclesial en el ámbito educativo, donde se expongan "las demandas, realidades y necesidades, con la marca de la Iglesia católica".
Entre las reivindicaciones de la Iglesia al respecto, recordó Gil Tamayo, se encuentra la de que la clase de Religión sea de oferta obligatoria en el Bachillerato o que se mantengan las horas de esta asignatura, dado que "se han transferido a las comunidades autónomas e incluso a la decisión de los centros, cuestiones con las que el Estado ya había establecido unas obligaciones". Además, en realidad, "nos encontramos con una reducción del horario, dispar de una Comunidad a otra, e incluso en el hecho práctico de que la oferta obligatoria y la elección libre de padres o alumnos no sea siempre posible", infringiéndose así la ley. Y todo esto sume a la asignatura en una injusta situación de precariedad y de vulnerabilidad, que a todos perjudica.