Católicos y científicos: Miguel Florencio Allué Salvador, por Alfonso V. Carrascosa, científico del CSIC

Católicos y científicos: Miguel Florencio Allué Salvador, por Alfonso V. Carrascosa, científico del CSIC*

La vida de Miguel Florencio Allué Salvador (1885-1962), científico católico y profesor, pensionado por la Junta para la Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas (JAE) , es de suma utilidad para comprobar que ciencia, fe y renovación pedagógica fueron desarrolladas en el seno de la Iglesia Católica durante la Edad de Plata, para caer en la cuenta de que la JAE no tuvo nada que ver con las ideologías totalitarias que acabarían desencadenando la Persecución Religiosa y que formarían del Frente Popular, y para demostrar que el discurso de la memoria histórica no tiene base científica.

Estudió en colegios religiosos como el colegio San Pablo de Zaragoza. Se licenció en Derecho en 1908 y en Filosofía y Letras en 1909 en la U. de Zaragoza, y se doctoró en ambas en 1909 y 1910, por la Universidad Central de Madrid. Fue profesor auxiliar de Filosofía y Letras en el curso 1909-1910, y de Derecho desde 1909 a 1939 en esta misma Universidad, para después ser nombrado catedrático de Lengua y Literatura en el Instituto Goya de Zaragoza. En 1941. Pasó a al Instituto Ramiro de Maeztu de Madrid. Fue director del Instituto entre 1918 y 1931 y dirigió la Residencia de Estudiantes de Zaragoza, que fundó en 1925. Se retiró de la vida pública con el advenimiento de la II República por salvar la vida, ya que dimitió de la dirección que ostentaba por incompatibilidad con las nuevas autoridades republicanas. Fue miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y numerario de la Real Academia de Nobles y Bellas Artes de San Luis de Zaragoza, y presidió la Asamblea Nacional de Academias Oficiales de Artes y Letras de España en abril de 1937. Ejerció también de periodista en varios diarios.

En 1911 fue pensionado por la JAE A París para estudiar sociología. Recibió un curso especial de Formación para futuros docentes de segunda enseñanza. A su vuelta propuso la inclusión de la Sociología en el plan de estudios de las Facultades de Derecho españolas, la idea de fundación de instituciones libres que se dediquen al cultivo de las ciencias sociales, tales como escuelas o sociedades científicas, la fundación de centros de documentación especiales para la Sociología y la inclusión de la Sociología en las enseñanzas primaria y secundaria, como muy bien exponen sus biógrafos José Manuel Azcona y Rebeca Herrero.

Obtuvo otra pensión en 1920, esta para estudiar Pedagogía Experimental en Inglaterra. Asistió al Congreso Pedagógico celebrado en Londres en enero de 1921, y se acercó a los nuevos métodos docentes que estaban desarrollándose en Europa. Lo cual demuestra hasta qué punto los laicos católicos contribuyeron a la renovación pedagógica española. Entre sus obras, recoger las que enumeran sus biógrafos José Manuel Azcona y Rebeca Herrero: Los sitios de Zaragoza ante el derecho internacional, Zaragoza, Editorial M. Sevilla, 1908; La condición jurídica de los cónsules: ensayo histórico-crítico, Zaragoza, Editorial Masalas, 1909; La representación social de los Estados en la historia, Madrid (Tesis Doctoral), 1909; Cómo se enseña la sociología en Francia, Madrid, Junta para la Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas, 1913; Curso para ampliación de estudios del Magisterio, celebrado en la Universidad de Zaragoza el año 1915, Madrid, Editorial Hospicio Provincial, 1916; Guía para visitar el Museo provincial de Zaragoza, Zaragoza, 1916; Bases para una pedagogía aragonesa: discurso leído en la solemne apertura de los estudios del año académico de 1917 a 1918, Zaragoza, Talleres tipográficos de La Crónica de Aragón, 1920; La Residencia de Estudiantes de la Universidad de Zaragoza, Zaragoza, Tipografía La Académica, 1925; El problema de la vivienda en España, desde el punto de vista municipal: Ponencia presentada al IV Congreso Nacional Municipalista, Madrid, Vicente Rico S.A., 1928; Lecturas literarias, Editorial Gambón, 1933; Lengua española y Literatura, Zaragoza, Editorial Gambón, 1935; Prontuario de Literatura Española: Desde los orígenes hasta el fin de la Edad de Oro, Zaragoza, 1936; El ahorro y la política social: Conferencia en las Bodas de Oro de la Caja de Ahorro y Monte de Piedad de Cáceres, Cáceres, 1956.