Paulina López Pita, científica que perteneció a la singular Cofradía de Investigadores de la Catedral de Toledo
Devota católica recientemente fallecida, perteneció a la Cofradía Internacional de Investigadores, sociedad pública de fieles creyentes con carácter religioso y canónico
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Nos encaminamos a la conmemoración del VIII Centenario de la Catedral de Toledo en 2026 , lugar en el que se dio la conciliación ciencia-fe de manera similar a como venía sucediendo desde siglos atrás en todas las catedrales católicas del mundo. Sería el maestrescuela o encargado de la enseñanza de la Catedral de Toledo Francisco Álvarez de Toledo Zapata quien fundaría el Colegio de Santa Catalina de Alejandría, embrión de la que terminaría siendo la Universidad de Toledo, cuyo actual escudo exhibe dos cruces de Santiago y la rueda martirial de Santa Catalina.
Además tiene una singularidad mundial: la Cofradía Internacional de Investigadores, sociedad pública de fieles creyentes, con carácter religioso y canónico, de origen católico pero con vocación ecuménica e interreligiosa abierta a otras confesiones cristianas e incluso a investigadores creyentes de otras religiones monoteístas históricas. Con sede en la Iglesia de san Sebastián de Toledo, tiene una vocación evangelizadora y se propone como objetivo fundamental dar culto a Jesucristo en el Santísimo Sacramento de la eucaristía, algo característicamente toledano que se expresa en su solemne celebración del Corpus Christi o en el arte de la catedral, cuyo culmen es su mundialmente conocido Transparente. A la Cofradía se pertenece siendo católico practicante o creyente de otras confesiones monoteístas. Se exige no haber roto públicamente con la comunión eclesial en su caso.
Pues bien, Paulina López, que Nació en Layos (Toledo) el 9 de junio de 1953 y falleció en Madrid el 7 de septiembre de 2024, formaba parte de la Cofradía como creyente católica. Licenciada en Filosofía y Letras (1975) y en Filología Semítica (Árabe e Islam) (1993) por la Universidad Complutense de Madrid, obtuvo en 1986 su doctorado por la UNED tras la realización de la tesis doctoral «Layos, origen y desarrollo de un señorío medieval», cuyo director fue Eloy Benito Ruano. Sus investigaciones estuvieron centradas, fundamentalmente, en el estudio del régimen señorial en la Castilla bajomedieval, así como en el conocimiento de la historiografía y los aspectos socioculturales de la sociedad islámica medieval, temas a los que dedicó diversos trabajos de investigación y sobre los cuales impartió numerosos cursos y conferencias.
Fue profesora titular en el Departamento de Historia Medieval y Ciencias y Técnicas Historiográficas de la Universidad Nacional de Educación a Distancia hasta el año 2021. Fue también directora de este departamento (2004-2012), así como coordinadora nacional de Profesores-Tutores de la UNED (1991-1993). Entre 2005- 2012 y 2015-2016 dirigió los cursos de verano celebrados en el Centro Asociado a la UNED en la ciudad de Ávila. Miembro de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo como Académica numeraria desde el año 2023 (Medalla IV) su discurso de ingreso se tituló «Eugenia de Montijo y Toledo en la historia contemporánea: un nuevo enfoque». Parte de su producción científica puede verse aquí.
La conciliación ciencia-fe en la Iglesia Católica es perfectamente visible en Paulina. Si hay un país en el mundo en el que tal conciliación haya estado presente ese país se llama España. No debemos dejar de comentarlo ahora que parece más necesario que nunca.