La Virgen de los Reyes, patrona de Sevilla: alcaldesa perpetua y primera imagen coronada de Andalucía

Desde el año 1946, la Virgen de los Reyes es la patrona de Sevilla y su Archidiócesis. Cada 15 de agosto, día de la Asunción de la Virgen María, miles de sevillanos hacen un paréntesis en sus vacaciones y abandonan por unas horas las playas más cercanas, generalmente de la provincia de Huelva y Cádiz, para volver a la capital hispalense y contemplar a su virgen en su multitudinaria procesión por las calles.

¿Por qué fue nombrada patrona de Sevilla?

Como hemos comentado, dicha distinción se remonta al año 1946, durante el papado de Pío XII y cuando el cardenal Pedro Segura era Arzobispo de Sevilla.

El 16 de junio, el Sumo Pontífice remitió una carta al Palacio Arzobispal sevillano, que concluía de la siguiente manera: “Confirmamos y declaramos a la Santísima Virgen bajo la advocación de Nuestra Señora de los Reyes, Principal Patrona ante Dios, de la ciudad y archidiócesis de Sevilla. Sin que obste nada en contrario”.

El 15 de agosto de ese mismo año se le otorgó de manera oficial este título. También a finales de aquel año, el 24 de noviembre de 1946, con motivo de su nombramiento como patrona, fue trasladada en procesión al Ayuntamiento de Sevilla, y en la que participaron todas las hermandades de penitencia, gloria y sacramentales. Además, la acompañaron imágenes de la talla de la Virgen del Amparo, la Amargura, el Valle, la Macarena, el Pilar y la Reina de Todos los Santos.

Una imagen muy arraigada a los sevillanos

Y es que la Virgen de los Reyes es una imagen muy arraigada al pueblo sevillano. De autor anónimo, fue realizada a comienzos del siglo XIII con madera alerce. Su modelado es de estilo gótico. Se le atribuye a la escuela francesa, lo que nos lleva a pensar que donada por Luis IX de Francia a su primo hermano Fernando III de Castilla (quien lideró la Reconquista de Sevilla). Además, fue la primera imagen de toda Andalucía en ser coronada a comienzos del siglo XX. En 1904, para más señas.

La oración a la Virgen de los Reyes

Generalmente, antes de las ocho de la mañana, tras el repicar de las campanas de la Giralda y finalizar los laudes del día de la Asunción, la procesión sale de la Catedral de Sevilla por la Puerta de los Palos.

Ya a las ocho de la mañana, la Virgen de los Reyes, bajo su palio de tumbilla, se posa en el dintel (la Puerta de los Palos), momento en el que se hace el silencio en la plaza para dar paso al himno de España. Tras una hora y media aproximadamente de procesión, hace nuevamente su ingreso en el templo hispalense.

Y como no puede ser de otra manera, cada 15 de agosto, los devotos de la Virgen de los Reyes entonan su himno en forma de oración;

A tus plantas se postra Sevilla,

por rendirte homenaje y loor.

¡Gloria, gloria a ti,

Virgen de los Reyes!

que nos riges con cetro de amor.

¡Gloria, gloria a ti,

Virgen de los Reyes!

¡Gloria ti,

¡Oh, Reina de amor!

Tuyo, Señora, nuestro hogar,

y tuyos nuestros amores.

Nuestra oración, tus flores,

y nuestro pecho tu altar.

Reina aquí, pues tu Sevilla,

que Fernando conquistó,

A ti, Virgen de los Reyes,

por patrona te aclamó.