EVANGELIO DEL DÍA

Evangelio 29 noviembre: "Levantáos, alzad la cabeza, se acerca vuestra liberación"

San Lucas 21, 20-28

Redacción Religión

Publicado el

3 min lectura

El Evangelio del día 29 de noviembre de 2018 con las lecturas de hoy:

Lectura del santo Evangelio según san Lucas 21,20-28:

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "Cuando veáis a Jerusalén sitiada por ejércitos, sabed que está cerca su destrucción. Entonces, los que estén en Judea, que huyan a la sierra; los que estén en la ciudad, que se alejen; los que estén en el campo, que no entren en la ciudad; porque serán días de venganza en que se cumplirá todo lo que está escrito. ¡Ay de las que estén encinta o criando en aquellos días! Porque habrá angustia tremenda en esta tierra y un castigo para este pueblo. Caerán a filo de espada, los llevarán cautivos a todas las naciones, Jerusalén será pisoteada por los gentiles, hasta que a los gentiles les llegue su hora. Habrá signos en el sol y la luna y las estrellas, y en la tierra angustia de las gentes, enloquecidas por el estruendo del mar y el oleaje. Los hombres quedarán sin aliento por el miedo y la ansiedad ante lo que se le viene encima al mundo, pues los astros se tambalearán. Entonces verán al Hijo del hombre venir en una nube, con gran poder y majestad. Cuando empiece a suceder esto, levantaos, alzad la cabeza: se acerca vuestra liberación".

Primera lectura

Lectura del libro del Apocalipsis 18,1-2.21-23;19,1-3.9a:

Yo, Juan, vi un ángel que bajaba del cielo; venía con gran autoridad y su resplandor iluminó la tierra. 

Gritó a pleno pulmón: "¡Cayó, cayó la gran Babilonia! Se ha convertido en morada de demonios, en guarida de todo espíritu impuro, en guarida de todo pájaro inmundo y repugnante". 

Un ángel vigoroso levantó una piedra grande como una rueda de molino y la tiró al mar, diciendo: "Así, de golpe, precipitarán a Babilonia, la gran metrópoli, y desaparecerá. El son de arpistas y músicos, de flautas y trompetas, no se oirá más en ti. Artífices de ningún arte habrá más en ti, ni murmullo de molino se oirá más en ti; ni luz de lámpara brillará más en ti, ni voz de novio y novia se oirá más en ti, porque tus mercaderes eran los magnates de la tierra, y con tus brujerías embaucaste a todas las naciones". 

Oí después en el cielo algo que recordaba el vocerío de una gran muchedumbre; cantaban: "Aleluya. La salvación y la gloria y el poder son de nuestro Dios, porque sus juicios son verdaderos y justos. Él ha condenado a la gran prostituta que corrompía a la tierra con sus fornicaciones, y le ha pedido cuenta de la sangre de sus siervos".

Y repitieron: "Aleluya. El humo de su incendio sube por los siglos de los siglos". 

Luego me dice: "Escribe: 'Dichosos los invitados al banquete de bodas del Cordero'".

Salmo 99,2.3.4.5

R/. Dichosos los invitados al banquete de bodas del Cordero

Aclama al Señor, tierra entera, 

servid al Señor con alegría, 

entrad en su presencia con vítores. R/. 

Sabed que el Señor es Dios: 

que él nos hizo y somos suyos, 

su pueblo y ovejas de su rebaño. R/.

Entrad por sus puertas con acción de gracias, 

por sus atrios con himnos, 

dándole gracias y bendiciendo su nombre. R/.

"El Señor es bueno, 

su misericordia es eterna, 

su fidelidad por todas las edades". R/.

Temas relacionados