La oración del día: San Benito Biscop
Es uno de los grandes reformadores de la liturgia y de la espiritualidad de la iglesia de Inglaterra y patrón de la congregación de los benedictinos ingleses
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Hoy recordamos a San Benito Biscop, que profundizó la Fe en el silencio contemplativo. Su nacimiento se sitúa en la corte del rey Oswy de Northumbria en el 629. A los veinticinco años experimenta la llamada a retirarse del mundo.
Para una mejor preparación, marcha a Roma a los pies de los Apóstoles Pedro y Pablo, Columnas de la Iglesia, empapándose bien de los principios de la Fe y de las obras de piedad. A su vuelta profundizará en el estudio de la Sagrada Escritura. Cuando Egfrido, hijo de Oswy, le pide que le acompañe nuevamente a la Ciudad Eterna, él lo hará gustoso, viendo la manera de renovarse en las virtudes cristianas. Posteriormente, entrará en el Monasterio de Lerins, vistiendo el hábito religioso para una mayor consagración contemplativa a Dios.
Por tercera vez viajará a Italia, pensando quedarse allí definitivamente, pero el Papa Vitaliano le encarga que retorne a Inglaterra, para ayudar a Teodoro de Tarso, Arzobispo de Cantorbery, y a Adriano en la atención a los anglosajones conversos a la Fe. Nuevamente el hombre propone y Dios dispone.
El rey entusiasmado por su tarea, le concede diversos terrenos en los que edificará monasterios, viajando alguna vez más a Roma para perfeccionarse en sus estudios sobre la Fe y la vida de piedad y perfección. También logrará implantar el espíritu del canto gregoriano, el ceremonial romano y la liturgia, levantando la vivencia religiosa del país en las celebraciones de cada día. San Benito Biscop muere en el año 690.
Oración
Santísimo confesor del Señor; San Benito Boscop, interceded por nuestra santidad, por nuestra salud del alma, cuerpo y mente.
Destierra de nuestra vida, de nuestra casa, las asechanzas del maligno espíritu. Líbranos de funestas herejías, de malas lenguas y hechicerías.
Pídele al Señor, remedie nuestras necesidades espirituales, y corporales. Pídele también por el progreso de la santa Iglesia Católica;
y porque mi alma no muera en pecado mortal, para que así confiado en Tu poderosa intercesión, pueda algún día en el cielo, cantar las eternas alabanzas.
Amén.