SANTO 25 DICIEMBRE
La Natividad del Señor: Dios hecho Niño
Hoy entramos en el Misterio de la Navidad.
Madrid - Publicado el
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Dios no falla nunca a su Promesa porque lo prometido es deuda y Él no puede fallar. Desde muchos siglos atrás, el Pueblo de Israel esperó este momento y ya llegó. Hoy la Iglesia contempla al Dios Hecho Hombre, en esta Solemnidad de la Natividad del Señor. Tal y como relata el Evangelio según San Lucas, salió un Decreto del Emperador Augusto, obligando a hacer un censo en todas las Provincias del Imperio. También José que era de la Tribu de David, bajó a Belén a empadronarse, con su Esposa María que estaba encinta.
Y sucedió que, estando allí, se le cumplió a Ella el momento del alumbramiento, dando a luz a su Hijo Primogénito. Tras envolverle en pañales le acostó en el pesebre, dentro del establo donde estaban, puesto que no había sitio para ellos en la posada. Había unos pastores que se encontraban al raso, velando por turnos los rebaños. De repente, se les apareció un Ángel del Cielo, y la Gloria del Señor los envolvió.
El Mensajero Celestial les dijo: “No temáis. Os traigo una Buena Noticia que lo será para todo el pueblo. Hoy en la Ciudad de David, os ha nacido un Salvador. Esta es la señal: “Encontraréis a un Niño envuelto en pañales y acostado en el pesebre”. De pronto, en torno al Ángel, aparecieron todos los coros celestiales que alababan diciendo: “Gloria a Dios en el Cielo, y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad”.
Ya los Padres de la Iglesia hablaban de este acontecimiento extraordinario. San Hipólito también recuerda que el 25 de diciembre y San Hilario de Poitiers recuerda que ocho días antes de las calendas de enero nació Cristo. De esta manera comienza el Tiempo de Navidad que, en estos ocho primeros días, se celebra como si fuese el mismo día 25, con la Octava de Navidad.