San Juan Leonardi, catequista de Dios
Madrid - Publicado el
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Octubre es el mes misionero en el que podemos ver cómo el Nuevo Mundo recibió la Fe de manos de misioneros españoles el Día del Pilar, o Santa Teresita del Niño Jesús fue Patrona de las Misiones al escribirse desde la celda del Convento con algunos misioneros en Japón. La Iglesia nos presenta hoy al presbítero San Juan Leonardi, imbuido también de este espíritu por la evangelización de todos los pueblos.
Nace en Luca, dentro de la Toscana italiana en el siglo XVI. Sus primeros pasos se encaminan hacia los estudios de farmacia, profesión que ejerció durante un breve tiempo, puesto que el Señor le marcaría pronto su misión: La vocación al sacerdocio. Secundando esta llamada, encaminó su ministerio de forma especial a los niños, con una atención particular en las catequesis destinadas a ellos.
Tal fue su capacidad de hablar de Dios que el Obispo le confió la catequesis de varias Parroquias de la zona. También destacó su gran capacidad de predicador y transmisor del Evangelio a través de sus homilías. El año 1574, marcaría un hito en su trayectoria, ya que funda la Orden de los Clérigos Regulares de la Madre de Dios, que le aportó no pocas incomprensiones y dificultades. Pero su deseo de extender a Cristo era más fuerte que todas estas dificultades.
Por eso logró que se juntasen un grupo de presbítero dispuestos a propagar la Fe. Precisamente, esta iniciativa fue asumida por la Santa Sede, transformándose en la Congregación “Propaganda Fide”. Cuando muere en Roma el año 1609, San Juan Leonardi deja tras de sí la restauración de la disciplina en varias Congregaciones. Su forma de apostolado ayudaba a los demás a profundizar en la formación de los cristianos. De esta forma les preparaba para recibir dignamente a Cristo Eucaristía.