San Leonardo, abad

Sus padres eran de clase alta y tenían bastante amistad con Clodoveo, rey de los francos. Debido a la amistad que mantenían el monarca mostró a los padres su interés de ser padrino del niño en el momento del bautizo. La idea del padre ra que su hijo fuese una persona educada en la Fe pero que su camino lo viese en las armas y en las empresas militares. Sin embargo Leonardo no se sentía atraído por la situación militar y de conquista de plazas. Su corazón se fijaba cada vez más en la vida religiosa. Secundado este camino se puso al servicio de San Remigio, obispo de Amiens. 

La amistad de San Remigio con Clodoveo hacía que el rey concediese al obispo la posibilidad de otorgar la libertad a cuantos presos mostrasen conversión de corazón y arrpentimiento en sus vidas. El gobernante vio también con buenos ojos la actitud de Loenardo y sus disposiciones por lo que le dio esa misma autoridad. No obstante cuando el magnate quiso mediar para que fuese obispo, el santo optó por irse a un Monasterio, alegando que él no se veía digno de tal dignidad. San Maximiliano de Micy fue el lugar donde se retiró. Queriendo tener más paz se refugió bosque adentro en Limoges.

Estando allí se presentó Clodoveo por aquellas tierra y, casualmente, en el momento del saludo, la esposa del rey se puo de parto atendiéndola Leonardo. Al salir todo bien el monarca envió a los mejores constructores para que le eedificasen un hogar, que le acompañó hasta su muerte. Es patrón de presos y parturientas.

Iconografía: Dado su patronazgo se le representa con una balanza signo de su patronazgo en alusión a la justicia.

Otros Santos: Severo, Emiliano y Cristina de Stumbel.