La Santa que potenció la dignidad y la formación de las mujeres

La Escritura alaba a la mujer hacendosa en el Libro de los Proverbios. La describe como mucho más valiosa que las perlas y que el hombre muchas veces es incapaz de encontrarla. Su trabajo es lucha y por aquí surge el carisma de la Santa que conmemoramos hoy porque la Iglesia nos presenta a Santa Paula Montal.

Nacida en Arenys de Mar (Barcelona) en 1799. De origen humilde y familia numerosa, le tocó vivir muchas estrecheces dada la pobreza en el hogar. Pero en esa casa nunca faltaba la oración y el ofrecimiento a Dios que nunca nos abanadona y que comparte nuestra situación. También comprobó la dureza del trabajo en el hogar viendo las duras labores de su propia madre que debía estar pendiente de tener todo a punto para la familia de la casa. 

Preocupada por la formación de la mujer en la sociedad, abre diversas escuelas. Paula, que había conocido a los escolapios, encuza sus escuelas en este carisma. Por eso, funda la rama femenina de esta espiritualidad con las Madres Escolapias. De gran devoción a la Virgen, pone en sus manos esta obra en bien de la dignidad y la formación de la mujer. Santa Paula Montal muere en 1899 y es canonizada en 2001 por San Juan Pablo II.