SANTORAL 19 FEBRERO

El Santo que comentó el Apocalisis al pie de los Picos de Europa

San Beato de Liébana aprovechó su misticidad en bien de la Fe y lo plasmó por escrito en su obra más destacada

Santo Toribio de Liébana

Jesús Luis Sacristán

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Hoy la Iglesia nos presenta a San Beato de Liébana. Pocos datos se conocen de su vida. Pero sí se autentifica que su nacimiento se sitúa en Asturias en el siglo VIII. Sintiendo la vocación a la vida consagrada entra como monje al Monasterio de San Martín de Liébana que, a partir del siglo XII, el convento se llamará de Santo Toribio de Liébana.

Firme defensor de la Fe, San Beato tuvo que reaccionar contra la invasión musulmana y contra el nestorianismo, desviación que dividía la condición divina y humana de Cristo. Esta desviacuión doctrinal provenía de Nestorio quien había llevado lejos la herejía arriana quien veía a Cristo como un simple hombre y no como el Verbo de Dios encarnado que se hace Hombre. 

En el caso del nestorianismo se defendía la división entre el Cristo Dios y el Jesús hombre. Elipando de Toledo fue un firme defensor del nestorianismo en continuidad con el arrianismo. Entonces Eterio, obispo de Osma defiende la Fe católica de Cristo que es Persona Divina con dos naturalezas: la divina y la humana sin mezcla ni división. A ello se une Beato desde Liébana.

Su gran formación teológica le hace escribir el Comentario al Apocalipsis apoyándose en Padres de la Iglesia como San Agustín o San Ambrosio. Incluso toma mucho del saber de San Isidoro de Sevilla. En esta obra destaca la presentación de la tierra redonda tal y como se imaginaba entonces. San Beato de Liébana muere a principios del siglo IX y su obra fue muy consultada en el siglo X.

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