San Pedro de Alcántara
Reformador franciscano, Desde los primeros momentos de su juventud, viendo la clara llamada de Dios, ingresa en los Franciscanos de los que llegó con el tiempo a ser Provincial
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Es importante la fortaleza de los hombres de Dios. Esto les lleva a robustecerse desde la Gracia de Dios para cada día. Y todo esto ayuda a vivir en la más estricta humildad. Así le ocurrió a San Pedro de Alcántara, cuya festividad celebramos hoy. La localidad cacereña de Alcántara vería nacer en 1499 a este santo español.
Desde los primeros momentos de su juventud, viendo la clara llamada de Dios, ingresa en los Franciscanos de los que llegó con el tiempo a ser Provincial. En este camino de santificación tendría mucha parte en el proceso revitalizador de los conventuales. Fue uno de los promotores y gestores de la reforma franciscana en España, desempeñando diversos cargos.
El santoral de hoy, lunes 19 de octubre
Su fama de santidad corrió por todas partes, hasta el punto de que Santa Teresa de Jesús, contemporánea de él, le tuvo como su confesor y guía espiritual, incluso a la hora de realizar la reforma en el Carmelo. Fue tan grande su personalidad ante la Santa abulense y ante el panorama de ese tiempo que hasta fue el que evitó que Santa Teresa fuese detenida y procesada por la Inquisición cuando investigaban sobre su ascendencia judía y sus visiones de Dios en éxtasis. Muchos fueron, además, los monarcas que le consultaron y le pidieron consejo, trabando con él una gran amistad. Es el caso del rey portugués Juan III.
Precisamente Portugal y España fueron los dos lugares donde trabajó en bien de la difusión del Evangelio. Su vida siempre estuvo impregnada de mucha austeridad y penitencia, mostrando una faceta de extrema dulzura en el trato con los demás. Ello marcó una impronta en el corazón de quienes se acercaban a él, fuesen nobles o gente del pueblo. Esta forma de proceder le acompaña hasta su muerte ocurrida el 18 de octubre de 1562.