San Teodoro
Adorador del Dios Único, su nombre ya hace honor a su condición de santo y hombre de buena voluntad, ya que Teodoro significa adorador de Dios
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Yavé en el Antiguo Testamento cuando entrega las Tablas de la Ley a Moisés le dice al principio: “Yo soy el Señor, tu Dios. No adorarás otros dioses”. En este día conmemoramos a San Teodoro de Heraclea, muy relacionado por su etImología con este Pasaje de la Sagrada Escritura. Su nombre ya hace honor a su condición de santo y hombre de buena voluntad, ya que Teodoro significa “adorador de Dios”.
Perteneciente a la milicia del Imperio Romano, es capitán de los soldados cuando gobernaba el emperador Licinio. Durante toda la vida estuvo entregado a multitud de combates y batallas, pero su disponibilidad y consagración total fue para el Señor. No en vano, libró mayor número de batallas contra el dragón maligno, para poner de manifiesto su fidelidad a Cristo y al Reino de los Cielos.
También visitó a todos los soldados perseguidos por su Fe para animarles en el combate y estimularles en la tarea de servicio que desempeñaban en bien de Roma. La ocasión de descubrirle como cristiano se presentó el día en que el soldado pidió al Emperador un permiso especial para que le dejase llevarse las estatuas de los dioses romanos a su cas en vípseras de fiestas en su honor.
Como excusa alegó que quería limpiarlas y perfumarlas para que el suave aroma impulsase a los que se acercasen, a ofrecerles sacrificios y ofrendas. Pero tan pronto como estuvo a solas en su casa con aquellas falsas divinidades, las destruyó todas, dejando a la vista de todos su condición de servidor de la Buena Nueva del Evangelio. Al enterarse Licinio, supo que Teodoro pertenecía a los cristianos, grupo considerado como enemigo de los intereses imperiales. Por eso, le hizo detener y encarcelar. San Teodoro de Heraclea muere decapitado en el año 319.