Diario de un peregrino: 8ª etapa, Logroño - Nájera

Javier Escartín se pone al frente de una nueva entrega de ‘Diario de un peregrino’ de TRECE, una serie en la que recorrerá el Camino de Santiago, una experiencia única en la vida. Nos despedimos de Logroño para poner rumbo hacia Nájera en esta octava etapa de casi 29 kilómetros, el tramo discurre por una zona vitivinícola de anchos valles y suaves montañas, en el que el enemigo será el calor.

Nada más comenzar Escartín conoce a tres peregrinas que toman el Camino como un reto personal que recomiendan ya que “ayuda a estar con uno mismo” afirma una de ellas. Encuentra a una peregrina francesa que firma que hace el camino para “cumplir el propósito de sus hijos” aunque afirma que parte del trayecto hacia Compostela la hará en autobús y tren por falta de tiempo.

Escartín hace parada en Navarrete donde encuentra a Mº Ángeles que recuerda como hizo el Camino con 8 vecinas peregrinas aunque confiesa que no haría el camino este año por una caída desde las escaleras. También encuentra a un peregrino que hace el camino en bicicleta recorriendo una media de 40-50 kilómetros afirma, aunque lo frecuente es hacer 60-80 kilómetros, además el número de ciclistas peregrinos ha aumentado la realidad es que solo supone el 6%”. Para en la Posada Ignaciano, que tiene como curiosidad que depende del sentido en el que vengas haces el camino francés o ignaciaciano, una posada que está ubicada en lo que fue el palacio del siglo XV del Duque de Nájera y estuvo San Ignacio, la dueña de la posada cuenta que curiosamente el banco del portal se construyó para subir y bajar del caballo a Ignacio de Loyola porque era bajo, además también muestra el pasadizo que usaba el duque para escapar de la casa”.

También llega a la Iglesia de Santa María de la Asunción para conocer a su párroco, don Armando, que lleva 10 años en esta iglesia que considera al pueblo como”vivo y joven”, Ignacio comenta que se trata de una iglesia del siglo XVI que destaca por su retablo y otros elementos que sorprenden, “es un retablo de los más espectaculares que podemos encontrar en España, dedicado a la asunción de la Virgen la parte superior y la parte central dedicada a la patrona de Navarrete, la Virgen del Sagrario” afirma Armando. “Con motivo de la cercanía de las fiestas de Santiago en 2008, un grupo de jóvenes nos propuso hacer una especie botafumeiro que sacamos algunos días de importantes festivos” relata el párroco.