El periodista Álvaro Requeijo analiza en TRECE las claves de los contactos entre Interior y los presos de ETA

En las últimas horas, han salido a la luz los contactos establecidos entre el jefe de prisiones del Ministerio del Interior y colaboradores de Arnaldo Otegi, que apuntan que ha habido trato de favor entre el Gobierno y los presos de ETA. Álvaro Requeijo es periodista en 'El Confidencial', donde se ha publicado el informe que apunta a "contactos frecuentes", y este jueves ha analizado en TRECE la información que se conoce por el momento.

En primer lugar ha echado la vista atrás hacia 2019 cuando se celebraron dos citas electorales. "Es muy ilustrativo comparar las fechas de los contactos que figuran en el informe con la hemeroteca. En el año 2019 hubo dos elecciones, hubo que negociar investiduras y los apoyos iban muy justos y los votos de Bildu fueron decisivos en algunos casos", apunta.

Respecto a los interlocutores del Gobierno, uno de ellos es el diputado vasco Julen Arzuaga, que forma parte del grupo parlamentario que integra Otegi y tenía información privilegiada. "El informe no dice en ningún momento que prisiones obedezca órdenes instrucciones de la izquierda abertzale, pero sí que es cierto que todos los nombres que se pusieron encima de la mesa en términos de petición o solitud de traslado o progresión de grado, finalmente se produjeron", asegura Requeijo.

"Conceden un segundo grado a Zigor Orbe Sevillano y este diputado de Bildu escribe al móvil personal del jefe de prisiones para darle las gracias, y al mismo tiempo dice que valorarían muy positivamente desde Cádiz a una cárcel más próxima al País Vasco, un acercamiento que se produjo meses después. Ojo, hace unos días pidió un permiso penitenciario y los jueces se lo rechazaron apuntando que el arrepentimiento fue insuficiente. Si ha llegado a la Audiencia Nacional es porque una junta de tratamiento de prisiones lo ha propuesto", explicaba el periodista como ejemplo de las conversaciones.

Por otro lado, hace unas semanas ya salieron a la luz "unas conversaciones en prisión con preso de ETA de Joseba Azcárraga, el otro principal interlocutor con el Gobierno en representación de los presos de ETA". En ellas, "los presos le reconocían al interlocutor que estaban muy disgustados con el papel que estaba jugando la Fiscalía, en concreto, de la Audiencia Nacional porque frenaba los beneficios penitenciarios", ha recalcado.

Además, Requeijo ha desgranado lo que incluye el informe la Guardia Civil que saca a la luz los contactos entre Gobierno y presos y explica las dos principales personas implicadas. "Por un lado, con un papel más técnico, el secretario general de instituciones penitenciarias, Ángel Luis Ortiz y luego hay otro de carácter más político que es Jesús Loza. Es un histórico del socialismo vasco y aunque ahora ya está fuera de política, sus últimas funciones fueron ser delegado del Gobierno en el País Vasco entre 2018 y 2020. Fue muy próximo a Patxi López, su trabajo siempre ha estado a caballo entre los presos y las víctimas de ETA. En 2018 en una entrevista avaló el final de la dispersión como una solución necesaria", ha narrado.

Respecto al ministro Marlaska, Requeijo es claro: "Me cuesta que creer que Marlaska no tuviese conocimiento de que existía esta vía de contacto o al menos que su secretario general de prisiones tenía un trato más o menos habitual con este tipo de emisarios. Sobre todo porque lo que hemos publicado son mensajes íntegros en los que se demuestra que hay un trato de favor, desde el mero hecho de que hay un secretario general mensajeándose por Whatsapp con representantes de lo que ellos consideran un colectivo".

"No creo que esto esté al alcance de cualquier abogado o cualquier preso. Desde ese punto de vista ya hay un trato de favor. No creo que lo desconociera porque desde algunos colectivos como la AVAT llevaban meses denunciando el papel de Azcárraga en este canal de comunicación", ha concluido.