"Hay un pacto evidente entre Koldo y Ábalos de no hacerse daño"

Koldo, como saben, ha declarado hoy en el Tribunal Supremo. Koldo García, el que lleva el nombre del caso. Hay un pacto evidente entre Koldo y Ábalos de no hacerse daño. Que a su vez han suscrito un pacto, está más claro que el agua, con Sánchez y con el PSOE. No vamos a hacernos daño. Es evidente que le han prometido, que no van a señalarle, no van a atacarle y que le van a amparar en todo lo posible. Y Ábalos está ahí el hombre, haciendo y cumpliendo su parte del pacto. Como Koldo, al que Ábalos cuando declaró ante el mismo Supremo, pues poco menos que le echó la culpa de prácticamente todo. Pero Koldo no va a denunciar ni va a acusar para nada al, perdón, “puto amo”, porque así le definió a Ábalos, “este es el puto amo”, lo dijo. Y “es un español como la copa de un pino”, dijo también. Ni Torrente, el de Santiago Segura, hubiera definido mejor al personaje.

Hoy, ha pasado por el Tribunal Supremo, ha negado prácticamente todo. Por ejemplo, ha rechazado que le han cobrado comisiones. Dice que la letra, la letra de anotaciones sobre adjudicaciones y contratos, papel que presentó Ábalos en el Tribunal Supremo, dice que no es su letra o por lo menos no identifica esa letra. Ha negado que entregara dinero al número dos del partido, a Santos Cerdán. Koldo dice que no, que no se ha producido ese hecho. Sin embargo, no ha negado que se viera en un bar con el jefe de gabinete de la señora Montero, alguna vez se vieron y con Aldama a la vez. Sí ha dicho que no recuerda o no cree que le entregaran ningún sobre con dinero. Le han preguntado por el dinero que encontraron en su casa, 37.000 euros, cuando fue detenido. Dice, bueno, eso es una costumbre familiar, ya saben que es una costumbre familiar, eso de tener 37.000 euros en casa.

En fin, ya sabíamos que en absoluto iba a tirar de la manta ni a acusar a nadie porque insistimos, hay un acuerdo entre los dos, entre Ábalos y él, para que siga el curso de la investigación. Están muy señalados ambos, no tanto ya por las acusaciones de Aldama, que son evidentes, sino por todo lo que la UCO, la Unidad Central Operativa, está aportando de sus investigaciones y les señalan abiertamente en todo este mangoneo, en este muladar que se está investigando todavía. Y luego, existe a su vez el pacto con el Partido Socialista que ya considera que, hombre, no es un apestado, Ábalos ya es el señor Ábalos. Antes era un apestado al que, poco menos que lo querían expulsar del partido, le abrieron expediente y está ahí, pendiente de expulsión, no lo van a expulsar, pero evidentemente le sacaron del grupo parlamentario y ahora ya parece que lo quieren proteger, porque saben que vale más por lo que calla que por lo que canta, eso es más que evidente.