Díez, coordinadora de acogida:"Llegan agradecidos pero con mucha preocupación por las personas que dejan allí"

Áliva Díez, coordinadora de acogida de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado, ha estado en 'El Cascabel' de TRECE para contar en primera persona como llegan los afganos a Torrejón, ya que ella está en contacto directo con los ciudadanos que están bajando del avión, concretamente trabajando en la parte de la derivación a las plazas de acogida de las personas que solicitan asilo en España.

Díez asegura que "son personas que en ningún caso han planificado esta migración. Tenían una vida totalmente normal y de la noche a la mañana se les ha roto su proyecto de vida, abruptamente y han tenido que emigrar forzadamente", lo que hace que la situación sea muy compleja.

"Nos estamos encontrando con muchas personas que han venido literalmente con lo puesto, algunas ni llevan el cargador del móvil y se han desconectado de sus seres queridos desde el momento de subir al avión. Vienen con todas las necesidades por cubrir, desde lo material hasta lo emocional", ha contado respecto a la situación de los afganos que aterrizan en Madrid.

En cuanto a su situación emocional, la coordinadora asegura que "son dos caras. Una muy agradecida, son muy conscientes de lo privilegiados que son por haber podido subir a esos vuelos, por estar en esa lista, por haber llegado a territorio seguro, pero también vienen con una altísima carga de miedo e incertidumbre y mucha preocupación por las personas que dejan atrás".

Y respecto a esa preocupación por las personas que dejan atrás, Díez recalca que "más que culpabilidad, creo que es un pozo de tristeza, son personas que en un primer momento no han decidido irse, tenían vidas muy normales y han sido forzadas a migrar. Más que culpa es un sentimiento muy doloroso de pensar que quizás nunca vayan a poder volver y pensar que no han podido emigrar junto a sus familiares. Hay muchos casos de familias separadas, en las que una parte ha podido subir a un avión y la otra se ha quedado en el aeropuerto de Kabul a la espera sin saber ni tener garantías de que puedan subir. Cada día es un tiempo a contrarreloj".

Al ser preguntada por el perfil de las personas que están siendo evacuadas a nuestro país, Áliva cuenta que "el perfil mayoritario es familias numerosas de 5, 6, 7 miembros. Vienen muchos niños muy pequeños. También hay personas solas que en muchos casos uno ha podido subir y el otro se ha tenido que quedar en Kabul de momento". Y añade que el motivo de haberse quedado algunos en tierra en diverso, pero "principalmente se trata en muchos casos de que en el momento de subir al avión o acceder al aeropuerto no han llegado, se han montado tumultos en el último momento y se han separado. Familias que han tenido que decidir entre quedarse en la oportunidad de subir al avión o mirar atrás para ver donde estaba parte de su familia. Gestionar esto emocionalmente es muy difícil. Llegan agradecidos, pero con la mente puesta en y ahora que va a pasar con el resto que se ha quedado atrás".

Por último, la coordinadora ha querido apuntar un dato importante sobre lo que cuentan al llegar. "Casi todos ponen de manifiesto que lo que están escuchando en las noticias internacionales no es exactamente lo que está pasando allí. Hay mucha información que no ha transcendido del trato que están dando los talibanes. Ellos son conscientes de verdad de la realidad que hay allí", contaba.