Un reportero de TRECE, asediado en las protestas por Hasél de Barcelona: "Me placaban para salir en cámara"

José Ángel Rioja relata a COPE uno de sus momentos más duros como periodista, del que quedó constancia en nuestra televisión este viernes

Millán Cámara

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Barcelona está en el punto de mira de todo el país durante los últimos días. Desde el martes, la Ciudad Condal es el principal escenario de las manifestaciones que se están produciendo en distintos puntos de España tras la detención y encarcelamiento del rapero Pablo Hasél. Protagonizadas en gran medida por jóvenes, los disturbios y la violencia han estado a la orden del día en estas protestas. El auge del tumulto se ha vivido sin duda alguna en Cataluña, con su urbe por excelencia llevándose la palma en cuanto a conflictividad.

Así lo puede atestiguar José Ángel Rioja, un reportero de TRECE que vivió esos momentos de tensión en las calles en primera persona este viernes. Entonces, el periodista de esta casa fue asediado e increpado por un grupo de manifestantes mientras realizaba una conexión en directo para el programa 'TRECE al día'. Una situación inédita para él desde que las reivindicaciones por Hasél empezaron a descontrolarse en tierras catalanas.

“Llevo desde el lunes en Barcelona. Desde el martes cubriendo disturbios, y no he tenido ningún problema hasta ayer por la noche. El cámara y yo hemos estado en todo el follón, como el resto de prensa, e insisto, sin ningún problema. Los manifestantes se nos acercaban de manera amistosa y hacían comentarios por ser de TRECE, pero nada más de ahí. Me han visto conectar en directo varias veces y nunca me han interrumpido”, recalca Rioja a COPE antes de pasar a relatar su versión de los hechos ocurridos hace tan sólo unas horas.

Cuarta noche de disturbios en Barcelona contra la detención de Pablo Hasél

EFE/Alejandro García

“El viernes noche acabábamos de llegar a la Plaza de Pau, creo que se llama, y el resto de periodistas comentaban que era muy fuerte que la mayor parte de los que la lían son chavales muy jóvenes y extranjeros. La verdad es que no me había fijado nunca en ellos, pero después del directo ya no se me olvida”, apunta nuestro compañero.

Al rato, José Ángel vivió una de las situaciones más incómodas a las que se puede enfrentar un periodista: “Entré tres veces en directo esa tarde. El vídeo pertenece a la segunda conexión. Empecé a hablar y me empezaron a hacer un corrillo, como se ve, mientras se cruzaban por delante de la cámara. Si sólo hubiera sido eso, hubiera sido anecdótico, pero empezaron a empujarme y a darme patadas por detrás, en la mochila. Me placaban para salir ellos en la cámara. Yo no era del todo consciente, pensaba que eran dos o tres chavales, pero viendo el vídeo veo que eran muchísimos más. Veía a mi cámara hacerles gestos y al resto de prensa gritarles que me dejaran en paz”.

Ante tal escena, Rioja intentó salir del paso como pudo en pleno directo. “Me temblaba la voz y me esforcé mucho por no perder el hilo de lo que decía. Al acabar de hablar, me dieron con los nudillos en el casco, como se ve, y todo acabó”, relata. Fuera de cámaras, la zozobra todavía continuó unos minutos más: “Devuelta la conexión, se encararon con nosotros. El cámara les decía que no me tocaran, que estaba trabajando. El resto de prensa les decía que nos dejaran en paz y ellos decían que grabáramos cuando les pegaba la policía”.

Por fortuna, la cosa no fue a mayores, y, un día después, José Ángel intenta tomarse la vivencia con la mayor filosofía posible. “Personalmente, como periodista, es algo que desgraciadamente me iba a pasar más tarde o más temprano. Podría entenderlo también por el hecho de pertenecer a una televisión concreta, pero fue completamente aleatorio. Me tocó a mí porque el programa era a esa hora. Podía haber sido cualquiera, porque son personas que no tendrán ni ideología propia. Ni sabrán de qué iba la manifestación. Sólo les interesa el caos por el caos y a mí me tocó recibir el caos, como al mobiliario urbano y al resto de ciudadanos”, sentencia al respecto del momento crítico captado por las cámaras de TRECE.

Nueva noche de tensión en Madrid y Barcelona tras las protestas a favor de Pablo Hasél