El método para conseguir que el pan mejore tu salud intestinal: previene el cáncer de colon y la diabetes tipo 2

Si eres de los que acostumbra congelar el pan para conservarlo y descongelarlo para su consumo, no te preocupes porque es muy bueno, ya que mejora la salud intestinal gracias a un proceso llamado Retrogradación del almidón.  "Yo lo congelo para tener más en casa y porque soy muy panero" admite José Luis Pérez. 

"Es verdad que parece muy novedoso" Comenta Cristina Lora, experta en seguridad alimentaria, "Aunque se sabe de sus beneficios desde los años 80´s" recordó y comentó que incluso en los años 2000, los estudios clínicos ya denotaban sus efectos beneficiosos; Pero ¿Cuáles son esos beneficios? Y ¿Por qué?

¿que sucede al congelar el pan?

Si bien se trata de un proceso químico un tanto complicado de comprender, Cristina, muy hábilmente, nos lo explicó de la siguiente manera. "Cuando compramos pan, este tiene almidón. El almidón es una estructura de dos componentes: amilosa y amilopectina. Cuando estas dos se compactan y entran en nuestro organismo; pues nosotros no tenemos una encima para digerirlas y directamente se van al colon. Nosotros en el colon tenemos unas bacterias y estas bacterias digamos que las usan y nos generan a nosotros unos ciertos beneficios"  La experta se refirió a este tipo de almidón resistente como almidón retrógrado. "Esto ocurre cuando ese pan lo metemos a ciclos de congelado y enfriado, congelado y enfriado, y así se va generando el almidón retrógrado, que es beneficioso"

Esto no solo ocurre con el pan;  Sino con todo alimento que contenga almidón, como las patatas, el arroz y la pasta. 

Beneficios del almidon retrógrado

Al final, esto de congelar alimentos que contengan almidón, como el pan, es beneficioso porque tiene efectos positivos para el colon. "Previene cáncer de colon, obesidad, diabetes tipo 2". "Tampoco pensemos que estamos haciendo un pan milagroso".  Aunque suene a que estemos convirtiendo nuestros alimentos en súper alimentos, lo cierto es que solo una parte pequeñita de ese almidón se vuelve retrógrado; Aun así no dejan de ser efectos positivos. 

Aunque "También puede tener algunos inconvenientes", Aclara la experta, "Al final estos ciclos de congelado y enfriado pueden hacer que las características orgánicas cambien". El hecho de congelar y descongelar repetidamente el pan u otros alimentos que contengan almidón, puede ocasionar, por ejemplo con el pan, que esté más chicloso o que la miga esté menos tierna; algo que ya afectará o no dependiendo del gusto de cada quién. Otro efecto curioso que nos comentó Cristina "Puede hacer que tengamos más gases de la cuenta y que nos tiremos más pedetes" confesó, ya que estas bacterias, al alimentarse de la amilosa y amilopectina, están haciendo esa digestión por nosotros, pero claro, ellas producen un gas y ese gas hace que nosotros nos inflemos; Pero como dijo Cristina Lora antes de despedirse "Al final eso es positivo".