El presidente de honor de la SECPAL defiende que se debe "eliminar el sufrimiento sin eliminar al sufriente"

Marcos Gómez Sancho, presidente de Honor de la Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL), defiende en 'TRECE Al Día' los cuidados paliativos frente a la ley de eutanasia aprobada por el Gobierno. El doctor afirma que es “una constatación diaria de decenas de miles de enfermos que han sido atendidos adecuadamente y se les ha suprimido o aliviado al máximo por lo menos, el dolor y el resto de los síntomas” y defiende que una sociedad civilizada “tiene que tener recursos, herramientas y mecanismos para eliminar el sufrimiento sin eliminar al sufriente”.

El médico opina que esta ley de eutanasia “no es lo prioritario” y justifica que lo prioritario es “atender a las personas que son posibles candidatos a solicitar la eutanasia, me refiero fundamentalmente a los ancianos, enfermos crónicos, dependientes o invalidantes y a los enfermos en situación avanzada o terminal, porque la situación es extremadamente calamitosa”.

El Presidente de Honor de la Sociedad Española de Cuidados Paliativos explica que en España “faltan 70.700 camas de plazas residenciales, sabemos que cada año se mueren en España 50.000 enfermos, que son 160 diarios, esperando a que le llegue la ayuda a la independencia a la que tienen derecho porque ya han sido evaluados. Hemos normalizado que las personas dependientes sean una población que agonice”.

"Lo prioritario no es la eutanasia, sino atender a las personas que son posibles candidatos a solicitar la eutanasia"

Como crítica al Partido Socialista, el doctor señala que “No sé por qué se arroga como progresista el hecho de acabar con la vida de un enfermo, y muchos más partidos de izquierdas, que siempre estuvieron al lado de los más enfermos, lo más pobres, más indefensos, más vulnerables… ese es el progresismo”. Y afirma que lo progresista es “cuidar y atender a estos pacientes que son los más débiles, frágiles y vulnerables que son las personas al final de la vida o con ancianos con elevado grado de dependencia”.

El Presidente de Honor de la SECPAL opina que esto será “la crisis más grave en la milenaria historia de la medicina, porque por primera vez el médico va a ser el gestor de la muerte de su enfermo y a mi me parece que esto es gravísimo porque va a deteriorar sin lugar a dudas la relación médico-enfermo basada en la confianza, confianza que muchos enfermos perderán cuando sepan que su médico o el médico de al lado son los que realizan eutanasias lunes, miércoles y viernes, por ejemplo”.

"La eutanasia va a deteriorar sin lugar a dudas la relación médico-enfermo basada en la confianza"

Comparando España con otros países del mundo dónde la eutanasia es legal, el médico defiende que “como ha sucedido en los países que tienen aprobada la eutanasia, habrá problemas, porque la ley dice una cosa y luego termina aplicándose a otras, porque la ley dice bien claro que debe ser aplicada a enfermos graves, sin solución, con un sufrimiento intenso…” y ejemplifica dicha afirmación con el último caso mediático que ha habido sobre la eutanasia: “Un profesor australiano que se le ha aplicado la eutanasia sin estar enfermo, sencillamente porque estaba cansado de vivir. Tenemos que pensar que tipo de mensaje están mandando nuestros políticos a los ancianos españoles aprobando esta ley de eutanasia”.

Por último, el Presidente de Honor de la Sociedad Española de Cuidados Paliativos afirma que “atender a un enfermo avanzado o a una persona mayor cuesta mucho dinero, y acabar con su vida es gratis, por lo que en algún momento cabe la posibilidad o el riesgo de que los vítores del poder, en un contexto de crisis como en el que vivimos, pues exista la tentación de tomar la vía más corta, por no decir la más barata, de resolver un problema que es gravísimo, que es la deficiente atención a los ancianos y a los enfermos personales”.