¿Por qué los artistas deciden tocar antes en Barcelona que en Madrid?

Distribuirse los sitios donde tocar siempre ha sido caballo de batalla de las ciudades y de los promotores. Antes no era tan así. El motivo ahora es, entre otras cosas, económico, pero son varios los factores que explican esto

Barcelona, a día de hoy, es más asequible que Madrid

Juan Andrés Rubert

Publicado el - Actualizado

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Ha levantado mucha polvareda que los últimos grandes artistas internacionales hayan decidido escoger la Ciudad condal antes que la capital de España. La lista es larga: U2, Coldplay, Adele, Beyoncé, Jay-Z, Ariana Grande, Katy Perry... No, no es que ellos no quieran tocar en Madrid y prefieran Barcelona. Tampoco es por motivos políticos. De hecho, les da exactamente igual. No siempre eligen ellos mismos las ciudades, ya que son las promotoras las que manejan los lugares por agenda y comodidad. Hay casos concretos, como el del cantante Bruce Springsteen. El de Nueva Jersey, cuando toca en España, suele ser en Madrid y en Barcelona, pero también elige actuar en San Sebastián, debido al cariño que le tiene a la capital guipuzcoana. Pero claro, es Springsteen, y a estas alturas no le van a controlar dónde tocar y dónde no.

Un aspecto fundamental es la comodidad de Barcelona respecto a Madrid. Es mucho más accesible ir a la Ciudad condal que a Madrid si, por ejemplo, el grupo no toca en Portugal. De esta forma, para ir al resto de Europa se tarda mucho menos. La capital española se queda un poco a caballo entre Portugal y el resto de Europa, siendo más asequible la opción catalana.

Por otro lado, está el tema del espacio en las localidades de los recintos. El Palau Sant Jordi de Barcelona tiene más espacio que el Barclaycard Center de Madrid, unas 2.500 localidades más. Para bandas o cantantes que no llenan un estadio grande, pero sí un recinto de 15.000 ó 20.000 butacas, es más rentable el Palau. Aunque, por ejemplo, U2 o The Rolling Stones tocaron en el Estadio Olímpico de Montjuïc -40.000 plazas- en vez de un estadio de Madrid.

Una tercera explicación es la de las agendas de los mismos recintos. El antiguo Palacio de los Deportes tiene una disponibilidad limitada, ya que ahí juega el Real Madrid de Baloncesto, cosa que con el Palau es más accesible. Montjuïc es más sencillo de escoger que el Santiago Bernabéu o el Wanda Metropolitano, este último en sustitución del viejo Vicente Calderón, ya fuera del circuito.

El IVA cultural, del 21 por ciento, también ha sido un escollo importante para las promotoras y los artistas. En España se paga muchísimo más por una entrada que en otros países de Europa. Malísimo para el bolsillo del fan y malo para las promotoras. La solución que escogen, si es un solo concierto, es Barcelona. Por lo menos, se ofrecen más localidades.

¿Qué es lo que ha cambiado en las últimas décadas?

El móvil económico es el más fundamental. Si un lugar da más dinero que otro, se escoge, obviamente, el de mayores ingresos. Los artistas pueden seleccionar alguna ciudad porque les apetece actuar allí, pero suelen ser excepción. La diferencia, respecto a la década de los 90 u 80, es que el interés cultural y acercamiento de las bandas y el público solía imponerse. Ciudades que perdieron hace años el cartel cultural y musical -por ejemplo, Valencia-, antes tenían a todos los artistas del momento actuando allí porque la gente los reclamaba. Los grupos acudían adonde querían que fueran, más allá de intereses meramente comerciales. Cierto es que la forma de gestionar todo era diferente, y las comparaciones son odiosas. Pero quizá sea un factor interesante a destacar.

Las administraciones públicas, según señalan los expertos, se tienen que encargar de promocionar la ciudad, generar un interés cultural, atraer a los artistas y venderles por qué es el mejor sitio para actuar. A día de hoy, Barcelona tiene mejor cartel que Madrid por esto a ojos de las promotoras. Cambiar las tornas o igualarlas es cuestión de actitud y de venderse bien.

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