La Bolsa se anima en la recta final del semestre, pese al repunte en el precio del petróleo

Se deja notar hoy en la Bolsa el efecto fin de trimestre, por el que muchos gestores intentan reestructurar sus carteras y "maquillar" sus posiciones en el mercado. El índice Ibex 35 arranca el día en 8.320 puntos, con una subida del 1 por ciento. Suben con especial animación Repsol, los bancos, las empresas acereras y las relacionadas con el turismo. Flojean las farmacéuticas, mientras Indra poco a poco intenta recuperar el resuello.

Pese a la mejora del día, los bolsistas siguen sumidos en un mar de dudas ante las malas perspectivas económicas que se abren en el horizonte. Un horizonte que se presenta lleno de nubes de tormenta. Los expertos aluden a una conjunción de factores para explicar el debilitamiento de la economía. Una cuesta abajo que amenaza con llevar a la recesión, al crecimiento negativo, tanto a Europa como a Estados Unidos. Esos factores son la menor demanda de bienes y servicios debido a la escalada de la inflación, los elevados costes de la energía y la caída de la inversión empresarial debido a los numerosos focos de incertidumbre. Las subidas en el precio del dinero que ya están realizando o van a realizar los grandes bancos centrales actúan como caja de resonancia que multiplican las posibilidades de recesión. Algunos servicios de análisis esperan una contracción del PIB de la zona euro de dos décimas en el tercer trimestre del año y de tres décimas en el cuarto. El crecimiento esperado para 2023 será, seguramente, muy tibio.

Y más sin ayudas externas. Hoy precisamente finalizan las compras de bonos del Banco Central Europeo. El BCE estudia la creación de una herramienta para frenar las primas de riesgo de los países del sur de Europa, pero todavía no se sabe cómo va a hacerlo y qué va a exigir a cambio a los países que se beneficien por ese nuevo instrumento. Hoy los inversores escucharán con atención a la presidenta del BCE, Christine Lagarde, que comparece en el foro de los banqueros centrales.

El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, ha asegurado hace pocos días que está convencido de que la economía de Estados Unidos puede manejar los aumentos de tipos de interés sin descarrilar. Está convencido de que el enemigo a batir es la inflación, que se encuentra en su nivel más alto de los últimos cuarenta años. Y ha reiterado su decisión de reducirla con la mayor rapidez posible, sin deteriorar en exceso la actividad económica. El pasado día 14 la Reserva Federal subió el precio del dinero tres cuartos de punto y seguirá haciéndolo en el futuro. Powell estima que la inflación acabará el año en EEUU en el 5,2 por ciento, que los tipos de interés lo hagan entre el 3 y el 4 por ciento y que el PIB estadounidense crezca este año y el próximo un 2,7 por ciento.

Hoy los mercados tendrán que cotizar dos referencias de cierto peso, como el índice de confianza de los consumidores de Estados Unidos y la balanza comercial de aquel país. Ayer las Bolsas de Wall Street cerraron con suaves pérdidas. Hoy el mercado de futuros apuntan hacia una apertura muy plana. En los demás mercados, el petróleo repunta después de varias jornadas de recortes en los precios. Hoy el barril de crudo tipo Brent del Mar del Norte se paga a 112,5 dólares. El euro sube, se cambia por 1,0580 dólares. En las “criptos” el Bitcoin cotiza sin grandes cambios respecto a la tarde de ayer, por debajo de 21.000 dólares. En el mercado secundario de deuda pública la rentabilidad de las obligaciones españolas a diez años se sitúa en el 2,67 por ciento, con una prima de riesgo de 110 puntos básicos. El oro se mantiene estable en torno a 1.830 dólares.