La Bolsa cierra en negativo, pero muy por encima de los mínimos del día

Al final la sangre no ha llegado al río. La Bolsa ha cerrado en negativo, pero muy por encima de los mínimos del día. La apertura alcista de Wall Street ha animado a los buscadores de gangas, que una vez más han aprovechado los recortes en los precios para tomar posiciones y para incorporarse al mercado.

Los analistas de Citi recomiendan aprovechar los recortes en los precios para hacer cartera, en especial en las acciones cíclicas. La recuperación de la economía y la mejora de los resultados empresariales justifican este consejo. Por su parte, los analistas de Barclays esperan que se mantenga el flujo de dinero desde el mercado de bonos al de acciones. Los expertos del banco británico consideran que el trasvase de dinero puede mantenerse un tiempo más, sobre todo si los datos de actividad y de inflación mantienen, como parece, una tendencia al alza.

También los analistas del banco estadounidense de negocios JP Morgan consideran que los inversores deberían apostar por acciones de empresas que se beneficien por la progresiva reapertura de la actividad económica. Energía, finanzas, sector industrial y de materiales serán los más beneficiados. Las vacunaciones y la progresiva reducción de las restricciones justifican estas previsiones.

Hoy han ayudado al mercado los analistas de la Fundación de las Cajas de Ahorro (Funcas), que han elevado tres décimas sus previsiones de crecimiento económico para España en este año. Esperan un aumento del PIB del 6 por ciento. El gobierno, en sus previsiones oficiales, espera un 6,5 por ciento Según Funcas, España crecerá más deprisa de lo que se barajaba inicialmente, gracias al mejor ritmo de las vacunaciones, a las menores restricciones y, en consecuencia, a la esperaba recuperación del turismo. Los fondos europeos de reconstrucción y las reformas económicas contribuirán al fortalecimiento de actividad económica. Para el ejercicio 2022, Funcas mantiene sus previsiones casi sin cambios. Las recorta una décima, hasta el 6,2 por ciento.

El índice Ibex 35 cierra la sesión en 8.966 puntos, con baja de un 0,46 por ciento. En los peores momentos del día el mercado ha buscado apoyo (y lo ha encontrado) en los 8.800. La estrella ha sido Telefónica, que ha operado con mucha volatilidad. Ha abierto por encima de cuatro euros con ganancias superiores al 4 por ciento, pero luego ha ido perdiendo fuelle. El beneficio neto de Telefónica en el primer trimestre ha crecido un 118 por ciento en tasa interanual, hasta 886 millones de euros. Su facturación se ha reducido un 9 por ciento, hasta 10.340 millones. La deuda de Telefónica se ha recortado un 6,4 por ciento entre enero y marzo, hasta 35.800 millones de euros. Espera reducir todavía más su endeudamiento en los próximos meses. Además, la empresa ha señalado que mantiene el dividendo sin cambios. Son factores que gustan especialmente a los analistas. Las mejores proyecciones que manejan los analistas más optimistas atribuyen a las acciones de Telefónica un potencial de subida próximo al 70 por ciento, con un precio de referencia de alrededor de 6 euros. El consenso de los expertos, sin embargo sitúan el horizonte más abajo, con un potencial del 20 por ciento a doce meses vista.

Ha subido hoy Laboratorios Rovi, que ha mejorado su beneficio un 71 por ciento, hasta 24 millones de euros. Ha elevado sus previsiones de ingresos tras los acuerdos de colaboración que ha firmado con la farmacéutica estadounidense Moderna. Pero ha bajado Técnicas Reunidas, que ha dado pérdidas de 60 millones de euros.

La Bolsa de Nueva York, que ayer cerró con pérdidas superiores al 2 por ciento en todos sus índices, hoy se mueve en positivo. Recupera parte del terreno perdido y eso a pesar de que se ha disparado el índice de precios industriales en Estados Unidos. El PPI ha subido un 6,2 por ciento, que es su mayor incremento de los últimos diez años. Este dato corrobora la impresión de excesiva escalada de la inflación que dejó el último dato de IPC y que, recordemos, subió un 4,2 por ciento.

En los demás mercados, la crispación se ha centrado en las criptodivisas. Elon Musk, el presidente de Tesla, la compañía de automóviles eléctricos de lujo, ha anunciado que no aceptará el Bitcoin como medio de pago y esta criptomoneda se ha venido abajo. Esta tarde se paga a 50.000 dólares, baja un 11 por ciento, cuando hace pocas semanas llegó a superar los 64.000 dólares. Han bajado también con rapidez otras criptos, como el Ethereum o el Dogecoin.