La subida de tipos de interés anima a los bancos en Bolsa, fortalece al euro y eleva el euríbor
El índice Ibex 35 termina el día en 8.012 puntos, con una suave pérdida del 0,2 por ciento
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Todos los mercados han reaccionado como un resorte a la decisión del Banco Central Europeo de subir medio punto el precio del dinero. En la Bolsa han subido los bancos, aunque no todos y no mucho. Ha destacado Bankinter, que ha publicado buenos resultados trimestrales. Su beneficio ha crecido un 11 por ciento, hasta 271 millones de euros. En general las entidades financieras han saludado la subida de tipos porque contribuirá a mejorar sus márgenes. Pero no lo han celebrado demasiado porque la dura medida del BCE compromete y condiciona el crecimiento económico, lo que equivale a menor actividad y a un más que probable incremento de la morosidad. La propia presidenta del BCE, Christine Lagarde, ha constatado que la actividad es débil y que no esprea que mejore en el corto plazo.
Además, mañana el sector financiero se reunirá con el gobierno para tratar sobre el impuesto extraordinario que se está gestando. Y eso genera incertidumbre. Se habla de una tasa del 5 por ciento sobre las comisiones e intereses que cobra la banca a sus clientes. Moncloa quiere imponer esta tasa a los bancos que facturen más de mil millones de euros al año. Con este impuesto extraordinario, el Gobierno pretende recaudar 1.500 millones de euros al año en los dos próximos ejercicios.
El más que posible enfriamiento de la actividad económica perjudica a las empresas ligadas al crecimiento económico y a las que soportan un mayor endeudamiento. Tendrán que enfrentarse a una menor actividad y con unos costes de financiación más elevados. También han sufrido las empresas relacionadas con el turismo y los viaje. Y ha bajado Repsol presionado por el descenso en el precio del petróleo. Esta tarde el crudo del Mar del Norte se paga a menos de 104 dólares por barril, casi tres más barato que esta mañana.
Con estos mimbres y tras algunos altibajos la Bolsa ha cerrado entre Pinto y Valdemoro. El índice Ibex 35 termina el día en 8.012 puntos, con una suave pérdida del 0,2 por ciento. Hoy se ha movido entre 8.100 y 7.950.
El horizonte marcado por una mayor debilidad económica supone también un descenso en la demanda de carburantes. Y eso se nota tanto en los precios del barril en los mercados internacionales como en la gasolina en las estaciones de servicio. De momento el precio medio del litro de gasolina 95 y del gasóleo se mantiene por debajo de los dos euros. Se paga hoy a poco más de 1,97 y a poco menos de 1,95 euros por litro, respectivamente. A esas cifras hay que restar los 20 céntimos de bonificación.
En los demás mercados, sube el euro. Ha llegado a rozar el cambio de 1,03 dólares aunque la final del día se cambiaba por 1,02. Y sube el euribor. La tasa diaria se asienta por encima del 1 por ciento, con una media en lo que va de mes del 0,95 por ciento. Hace un año se movía en negativo, en el menos 0,49 por ciento. Está cantado por tanto el encarecimiento de las cuotas de las hipotecas variables en la próxima revisión. Según datos de la Asociación Hipotecaria, más de cuatro millones de personas tienen actualmente una hipoteca a tipo variable en España.
En el mercado de deuda destaca la tensión en los bonos de Italia. Su rentabilidad al plazo de diez años se ha disparado hasta el 3,7 por ciento. La prima de riesgo italiana, en 240 puntos, frente a los 125 de España. Este es un gran quebradero de cabeza para el Banco Central Europeo, ya que la deuda pública de Italia alcanza el 150 por ciento del PIB. El BCE seguirá comprando deuda de los países afectados por las tensiones en los mercados. Pero el país en cuestión debe cumplir con las normas fiscales de la UE, no podrá estar sujeto a un procedimiento por déficit excesivo y deberá seguir las recomendaciones de la Comisión Europea.
Hoy el Tesoro español ha captado 5.060 millones de euros en la subasta de deuda a medio y largo plazo. La demanda ha rozado los 9.000 millones. Ha aumentado la rentabilidad de los títulos con vencimiento a 3 y 10 años, pero ha bajado el rendimiento de los bonos a cinco años. El diez años ha salido al 2,55 por ciento, el cinco años al 1,78 y el tres años al 1,43 por ciento. El dinero todavía acude con avidez a las colocaciones de deuda de España, pero exige mayores rendimiento.