La Bolsa cierra en un quiero y no puedo mientras el petróleo se dispara hasta 30 dólares

A estas alturas, ya nadie espera que los mercados abandonen la volatilidad y la debilidad hasta que comience a remitir la crisis sanitaria. De hecho, ha aumentado la preocupación en los mercados después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, haya oscurecido dramáticamente sus estimaciones sobre la pandemia de coronavirus. La Casa Blanca espera ahora hasta 240.000 fallecidos en EEUU por el coronavirus, con el pico dentro de dos semanas. Empeoran las previsiones, lo que va a dilatar el periodo de confinamiento de la ciudadanía y el tiempo en que las empresas permanecerán inactivas. Parece que el golpe sobre la economía será bastante peor de lo que se esperaba hasta ahora.

Los más pesimistas temen una caída superior al 30 por ciento en el PIB de EEUU en segundo trimestre. En concreto, Goldman Sachs espera que el PIB estadounidense caiga  hasta un 34 por ciento en el trimestre que acaba de arrancar. También los analistas de S&P Global Ratings esperan un fuerte impacto sobre todo en este segundo trimestre. Esta agencia de calificación espera que llegue la recuperación en la segunda mitad del año.  Las cifras son estremecedoras. Hoy se ha conocido que más de 6,6 millones de estadounidenses solicitaron la semana pasada el  subsidio por desempleo. En España más de 830.000 personas han engrosado las filas del desempleo en marzo. Algo nunca visto.

Pero la Bolsa de Nueva York quiere ponerle buena cara al mal tiempo y sube esta tarde más de un 1 por ciento. Dentro de casa, el índice Ibex 35, tras una sesión muy volátil, ha bajado un 0,08  por ciento, hasta 6.574 puntos.  Un 6 por ciento ha subido Repsol al calor de la resurrección del precio del petróleo. Hoy el barril de crudo tipo Brent del Mar del Norte se ha disparado  un 20 por ciento. Roza los 30 dólares ante la posibilidad de Rusia y Arabia Saudí alcancen pronto un acuerdo para reducir su producción. Los rumores de mercado aseguran que pueden recortar su producción entre diez y quince de millones de barriles por día.

Ganancias también en Iberdrola. El presidente de la eléctrica, Ignacio Sánchez Galán, en la junta de accionistas telemática que se ha celebrado hoy, ha anunciado que mantiene sus previsiones de crecimiento del beneficio, su plan de inversiones y su dividendo para este año. Llaman la atención estos anuncios de Iberdrola, justo cuando otras compañías están reduciendo sus estimaciones de beneficio y su retribución al accionista. Ha subido la aerolínea IAG, a pesar de que la empresa hispano británica ha eliminado el dividendo complementario. Ha pesado más la noticia de que Morgan Stanley ha entrado en la compañía, con un 5 por ciento del capital. Es casi el mismo porcentaje que vendió hace poco Capital Group. Sigue disparada Supermercados Dia. Los inversores han premiado su apuesta por el reparto a domicilio en estos momentos de confinamiento de la población por el coronavirus.  Fuertes ganancias también en PhamarMar, que ha presentado un nuevo ensayo clínico para utilizar su antitumoral Aplidín en el tratamiento del Covid-19. Destaca también la subida de Pescanova, después de que Abanca haya reforzado su posición en el capital de la compañía.

Hoy el Tesoro español ha realizado una nueva subasta de deuda. Ha colocado 5.987 millones de euros en  bonos a 3 y 5 años y en obligaciones con vencimiento a 10 y 30 años. La tesorería pública está apretando el paso en sus emisiones, ante la  seguridad de que el déficit público va a crecer con fuerza como consecuencia de las medidas que está tomando el gobierno para contrarrestar los efectos de la crisis del coronavirus sobre la actividad económica. Hoy aumentado claramente su coste de financiación respecto a la subasta anterior. El rendimiento del bono a tres años ha pasado del 0,077 al  0,107 por ciento. La rentabilidad de la deuda a cinco años ha pasado de negativa a positiva, ha pasado de menos 0,243 por ciento a más 0,276. Las obligaciones a diez años ha crecido hasta el 0,694 por ciento, desde el 0,661 anterior. Finalmente, los títulos con vencimiento a 30 años han salido con una rentabilidad del 1,565 por ciento.