La Bolsa da por buenos los agridulces datos de empleo de Estados Unidos
El índice Ibex 35 cierra el viernes en 9.317 puntos, con alza de un 1,63 por ciento
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El índice Ibex 35 cierra el viernes en 9.317 puntos, con alza de un 1,63 por ciento. En el conjunto de la semana el balance es positivo, con una ganancia del 1,3 por ciento. En lo que va de año acumula una revalorización superior al 13 por ciento. Siguen animadas las acciones de los bancos, sobre todo los que tienen mayor presencia en el mercado doméstico, como Caixabank, Bankinter y Sabadell, aunque mejoran todos. Los inversores confían en que se derogue el impuesto al sector financiero si se produce un cambio de gobierno tras las elecciones del 23 de julio. Además, las Bolsas respiran con alivio después de que tanto el Congreso como el Senado de Estados Unidos hayan aprobado el aumento del techo de deuda y de gasto, lo que elimina el riesgo de “default” o impago.
Los mercados también han agradecido la disminución de las presiones inflacionistas en la zona euro. Según el dato adelantado de mayo que se conoció ayer, la tasa general de IPC se ha reducido desde el 7 por ciento hasta el 6,1. La tasa subyacente (la que no tiene en cuenta ni la energía ni los alimentos frescos) se ha situado en el 5,3 por ciento frente al 5,6 anterior. Son cifras mejores de las que se esperaban. Pese a esta mejora, los mercados esperan que el Banco Central Europeo realice dos subidas más en el precio del dinero. Un cuarto de punto a mediados de ese mes y otro tanto a finales de julio.
Esta tarde se han publicado las cifras de paro de Estados Unidos. Han sido agridulces. La tasa de desempleo ha aumentado tres décimas, hasta el 3,7 por ciento. Sin embargo, la economía estadounidense ha creado en mayo más de 330.000 empleos no agrícolas. Es una cifra muy superior a la que esperaba el mercado y que le complica la vida a la Reserva Federal, cuya próxima reunión tendrá lugar a mediados de mes. De momento, Wall Street, inasequible al desaliento, sube esta tarde como alegría.
Paralelamente, parece que remiten los temores sobre el sector financiero de Estados Unidos, muy presionado en las últimas semanas por la crisis de varias entidades regionales. Las últimas cifras indican que las salidas de depósitos en los bancos medianos y pequeños prácticamente se han detenido. Se reducen las preocupaciones por la solvencia de estas entidades, aunque siguen las dudas sobre su rentabilidad.
En los demás mercados, el petróleo repunta hasta 75,5 dólares por barril de crudo del Mar del Norte. Los mercados esperan con mucha expectacion la reunión que celebrarán este domingo los países exportadores de petróleo integrados en la OPEP con sus socios, entre los que destaca Rusia. Los analistas tienen dudas. No saben si se producirá un nuevo recorte de la producción, como quiere Arabia, o si se mantendrán las cuotas actuales, como defiende Rusia. Nadie olvida que Rusia es el segundo mayor exportador de crudo del mundo, solo por detrás de Arabia.
El euro se mantiene claramente por debajo de 1,08 dólares. La divisa estadounidense se ha fortalecido ante las expectativas de que la Reserva Federal suba algo más el precio del dinero. Se espera una o dos alzas más. Y seguramente lo mantendrá alto durante mas tiempo del que se esperaba hasta ahora. Los expertos del broker japonés Nomura esperan nuevas subidas del dólar en el corto y medio plazo. El oro repunta, se acerca al precio redondo de los 2.000 dólares por onza. En el secundario de deuda pública, se reduce suavemente la rentabilidad de los bonos. Las obligaciones españolas a diez años ofrecen un 3,30 por ciento. Los bonos alemanes al mismo plazo rinden un 2,30 por ciento y los de Estados Unidos, un 3,62.