La cumbre de la “OPEP” y las subastas del Tesoro coparán la atención de los inversores la próxima semana

Hoy ha empeorado la situación en la Bolsa. Los bancos han lastrado al conjunto del mercado. Las entidades financieras se encuentran ante un escenario complicado, con una economía que pierde impulso y con el horizonte de, al menos, otro año por delante con tipos de interés al cero por ciento. Así lo indicó ayer el BCE, que eliminará las compras de bonos a finales de año, pero no espera subir el precio del dinero hasta el próximo verano.

Por el contrario, ese escenario de tipos de interés bajos durante más tiempo favorece a las eléctricas y la inmobiliarias. Se benefician por un periodo más largo con el precio del dinero en cero, debido a su endeudamiento y/o a su necesidad de financiar inversiones.

Los mercados han tenido que lidiar hoy con otras referencias preocupantes. Aumenta la tensión comercial entre China y Estados Unidos y se dispara el déficit público español hasta la cifra récord de 1,16 billones de euros.

Ahora los inversores miran hacia la próxima semana, que se presenta también muy intensa.  El lunes comenzará la ampliación de capital de

Repsol para el pago de próximo dividendo. Los accionistas pueden cobrarlo bien en acciones bien en efectivo, a su elección.   Tienen derecho al cobro los accionistas que lo fueran antes del día 15. La ampliación de capital se realizará  en la proporción de una acción nueva por cada 34 antiguas. Repsol garantiza la compra de los derechos de suscripción a 0,485 euros. La ampliación finalizará el 6 de julio.  El 29 de junio es el ultimo día para solicitar el pago en efectivo, que se abonará el día 10 de julio.

El Tesoro tiene por delante una semana muy ajetreada. Colocará el martes letras a 3 y 9 meses y el jueves subastará deuda a medio y largo plazo.  El jueves hay reunión del consejo del  Banco de Inglaterra. No se esperan grandes novedades, ni en cuanto a tipos de interés ni en cuanto a su programa de compra de bonos.  El jueves, además, se conocerá el índice que mide la confianza de los inversores de la zona euro.

Es una referencia importante sobre todo tras los cambios políticos que se han producido en Italia y en España.

La semana terminará con una cita también de gran calado, como es la “cumbre” de la OPEP. El petróleo se paga a 75 dólares por barril, cuando a finales de mayo estaba a 80. Ya se empiezan a escuchar las primeras voces que solicitan a la OPEP que vuelva a los niveles de producción anteriores a los últimos recortes. Según la Agencia Internacional de la Energía, la producción de petróleo de Venezuela e Irán podría reducirse hasta en un 30 por ciento.  Rusia y los países del Golfo podrían incrementar sus exportaciones para cubrir el  hueco.