Las Bolsas digieren como pueden las cifras de paro de Estados Unidos y cierran con ganancias

El índice Ibex 35 ha cerrado la sesión en 6.783 puntos, con alza de un 0,78 por ciento. No han subido todos los valores, ni mucho menos. Han cerrado en negativo empresas de tanto peso como Inditex, Repsol o Telefónica. La semana se salda con una pérdida del 2 por ciento. La caída acumulada en lo que va de año es de un 29 por ciento. China y EEUU han rebajado la tensión existente entre ambos países a cuenta del coronavirus y han acordado seguir con sus acuerdos comerciales. Y los mercados se han calmado. Al menos por ahora.

En Estados Unidos, el desempleo ha pasado “del tirón” de su mejor registro de los últimos 50 años, a situarse en su peor lectura de los últimos 80. Ha alcanzado el 14,7 por ciento en abril, frente al 4,4 contabilizado en marzo. Y gracias, porque se esperaba un dato todavía peor. En abril se han destruido 20,5 millones de puestos de trabajo no agrícolas. También en este caso se esperaban noticias todavía peores, así que los mercados han optado por ver la botella medio llena y los han dado por buenos. La Bolsa de Wall Street se mueve a media tarde con ganancias superiores al 1 por ciento.

Ahora los mercados esperan con expectación los resultados de la reunión del Eurogrupo. Sus decisiones se cotizarán ya el lunes. En esta ocasión, a diferencia de otros consejos, los más optimistas quieren entrever algunos rayitos de luz al final del túnel. Sobran los motivos por los que Europa necesita zafarse cuanto antes de su tendencia al desacuerdo. Sobran enfrentamientos entre norte y sur y faltan dirigentes con altura de miras que tiendan puentes de solidaridad. Quizá hoy Europa saque algo en limpio.

Cada minuto que pasa es más necesario un acuerdo sobre los instrumentos y las condiciones que deben aplicarse para ayudar a las economías más necesitadas. Los datos económicos son demoledores. Además de las cifras de desempleo en EEUU, este viernes se ha conocido que la producción industrial se ha contraído en España un 11,9 por ciento en tasa interanual. En Alemania, este indicador de actividad se ha contraído un 9,2 por ciento. Es un dato peor del esperado. El instituto alemán IFO, por su parte, asegura que la industria germana se ha desplomado en abril un 51 por ciento.

Una recuperación con la forma del logo de Nike

Tampoco las previsiones son tranquilizadoras. Los analistas, en general, están abandonando la idea de una recuperación en V, incluso relegan a un segundo plano la idea de una U. Ahora esperan que la economía dibuje algo parecido al logotipo de la firma deportiva Nike. Dependerá de la evolución de la pandemia, de la aparición de medicamentos y vacunas y de lo que tarde la economía en reaccionar.

La Comisión Europea estima que la economía española sufrirá una contracción del 9,4 por ciento en el ejercicio en curso. El déficit alcanzará el 10 por ciento, con la deuda por encima del 115 por ciento del PIB. Por su parte, la Airef, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal, cree que la recuperación no será en V, ya que el PIB puede crecer tan solo un 5,8 por ciento el año que viene, frente al 11,7 por ciento que puede contraerse en el ejercicio en curso. Teme, además, que tanto la deuda como el déficit aumenten más de lo que esperan el gobierno y la Comisión Europea.

Pero hay más. Los expertos de Deloitte creen que la economía española se contraerá un 9 por ciento este año. Esperan que la recuperación comience en el cuarto trimestre del año, para crecer entre un 4 y un 5 por ciento en el año 21. Por su parte, los expertos de Funcas, la fundación de las Cajas de Ahorros, estiman que hasta el año 2023 el crecimiento económico y el empleo no se recuperarán hasta los niveles previos a la pandemia. Funcas estima que la tasa de paro alcanza ya en España el 34 por ciento si se contabilizan los trabajadores afectados por un ERTE. Las Cajas esperan una caída del PIB del 7 por ciento este año y una recuperación del 5,4 por ciento el próximo. Agárrense, que vienen curvas.