El estado de alarma, las restricciones y el toque de queda hacen zozobrar a la Bolsa

La Bolsa devuelve hoy buena parte de las ganancias que consiguió la semana pasada. El índice Ibex 35 pierde un 1 por ciento tras las primeras operaciones del día, hasta 6.820 puntos. El estado de alarma en España, las restricciones y el toque de queda enfriarán todavía más la ya maltrecha actividad económica. Y los inversores se muestran cada día más preocupados porque las Bolsas se resentirán. Hoy pocos valores se salvan de la quema. Tan solo opera claramente en positivo Cellnex, que estudia crecer en Europa mediante una nueva compra de torres de telecomunicaciones.

Al final de la semana se conocerán las cifras de crecimiento económico en España, en la Unión Europea y en Estados Unidos. Los mercados temen que la segunda oleada de la pandemia esté deteriorado la actividad económica más de lo que se pensaba. Hoy se espera el índice IFO de clima empresarial en Alemania.

A una semana de las elecciones en Estados Unidos

Además, aumenta la incertidumbre a falta de una semana para las elecciones en Estados Unidos. El actual inquilino de la Casa Blanca sigue por detrás en las encuestas, pero ha reducido la distancia. Crece el riesgo de que los resultados tarden en conocerse si hay impugnaciones de los votos por correo y anticipados. Las Bolsas prefieren que los resultados sean claros y se conozcan rápidamente. Sería malo para los mercados que la situación se enquiste y se judicialice. Las Bolsas, aunque prefieren a Trump, probablemente, darán por bueno el veredicto de las urnas si el partido demócrata de Biden alcanza la presidencia con cierta holgura, mantiene el control del Congreso y se hace con la mayoría en el Senado. Y, como guinda, a estas alturas parece hasta después de las elecciones no habrá un acuerdo en el Congreso estadounidense para poner en marcha el nuevo plan de estímulo fiscal.

La reunión del consejo del Banco Central Europeo, los datos de PIB y los resultados de las entidades financieras van a marcar la agenda de la semana. Los analistas creen que en esta ocasión el BCE no tomará grandes decisiones, pero si esperan que haya novedades en la reunión siguiente, la del 10 de diciembre. En este último consejo del año, ya con más datos en la mano, podría ampliar su programa de compras de activos.

Resultados empresariales

El ámbito empresarial se presenta también muy intenso en los próximos días. Hoy publican sus cuentas Acerinox y Liberbank. El banco ha ganado 59 millones de euros al cierre de los nueve primeros meses del año, lo que supone una caída del 39 por ciento. La entidad ha destinado 177 millones a saneamientos.

El día 27 le tocará el turno al Banco Santander. Los expertos espera una caída del resultado neto hasta algo más de 1.100 millones de euros, frente a los 2.130 millones contabilizados un año antes. Al cierre del la primera mitad del ejercicio el Santander anunció pérdidas históricas, de 10.800 millones de euros, tras realizar provisiones y actualizar su fondo de comercio. Las cifras de Bankia verán la luz el día 28, miércoles para más señas. Los analistas pronostican para Bankia un resultado plano con ligeras pérdidas en el tercer trimestre del año, frente al beneficio de 176 millones contabilizado en el mismo periodo del pasado ejercicio.

Los analistas trabajan también ya con las previsiones de los resultados de Repsol, que se conocerán el día 29. Se espera que de pérdidas de unos 20 millones de euros en el trimestre, cuando un año antes había obtenido un beneficio de más de 500 millones. También Telefónica publicará resultados el día 29. Los expertos esperan una caída del 13 por ciento en el volumen de ingresos de la operadora.

El viernes se esperan las cifras trimestrales de BBVA, Banco Sabadell y Caixabank. Los tres, como el resto del sector financiero, han realizado fuertes provisiones en los últimos trimestres. Los expertos barajan un beneficio neto de BBVA del orden de 800 millones de euros, con un descenso de algo menos de un 40 por ciento. Para Caixabank esperan un resultado neto de 340 millones, prácticamente la mitad que hace un año. Para Sabadell los analistas estiman un resultado prácticamente plano.