Las Bolsas tiemblan tras el aviso a navegantes que ha lanzado Apple

Hoy, en el maltrecho ánimo de los inversores, ha pesado el “profit warning”o aviso de menores resultados que ha lanzado el gigante estadounidense Apple. Ha reducido su previsión de ingresos ante la caída de la demanda en China, un país en el que la actividad económica está perdiendo fuerza. El fantasma del enfriamiento económico a nivel global continúa sobrevolando los patios de operaciones.

Las acciones de la firma de la manzana han llegado a caer esta tarde cerca de un 10 por ciento, lo que ha arrastrado al índice Nasdaq de empresas tecnológicas y de rebote también a los demás mercados. Han sufrido todas las empresas del sector, como Samsung, Intel o Microsoft.  A media sesión en Estados Unidos, -coincidiendo con el cierre de las Bolsas europeas-, los índices de  Wall Street perdían en torno a un 1,5 por ciento.

Los mercados del Viejo Continente han sufrido la onda expansiva procedente de la compañía de la manzana. Sin embargo, la Bolsa española ha conseguido aguantar el tirón con bastante donaire. La volatilidad ha sido la respuesta del índice Ibex 35 a esas dudas de las plazas europeas y estadounidenses. Ha cerrado el día en 8.523 puntos, con una pérdida mínima del 0,3 por ciento. Han sostenido al mercado básicamente Telefónica, las eléctricas y los dos grandes bancos.   Por el contrario, las empresas relacionadas con las materias primas y el turismo se han venido abajo.

Ahora los inversores vuelven su mirada a los importantes datos macroeconómicos que se publicarán mañana. El más relevante es el paro de Estados Unidos. Los analistas esperan que la tasa de desempleo se mantenga estable en el 3,7 por ciento. Creen que la economía estadounidense creó en diciembre 175.000 empleos no agrícolas. El viernes, además, se conocerá el IPC de la zona euro. La inflación se encuentra actualmente en el 1,9 por ciento.  Se publican además las cifras de actividad en sector servicios en toda Europa, en China y Estados Unidos.

En el mercado de deuda, la prima de riesgo aumenta ligeramente hasta 128 puntos. El Tesoro ha colocado hoy algo más de 5.000 millones de euros en la primera subasta de deuda de este año. Ha vendido bonos a 3 y 5 años y obligaciones con vencimiento a diez y quince años, estos últimos ligados a la inflación. La tesorería pública ha conseguido abaratar su coste de financiación. Ha bajado el rendimiento de estos títulos en todos los plazos. A tres años, incluso, la rentabilidad vuelve a ser negativa. Menos 0,028 por ciento. El Tesoro cobra a los inversores que colocan su dinero a este plazo. El activo más demandado, las obligaciones a diez años, ofrecen un rendimiento del  1,41 por ciento.

El dinero que huye de los activos con más riesgo se refugia en bonos alemanes, lo que hace subir su precio y bajar su rentabilidad. El rendimiento del “bund” a diez años se ha reducido a tan solo un 0,15 por ciento. También el oro está actuando como refugio ante la incertidumbre. La onza del vil metal se paga a casi  1.300 dólares, su precio más alto de los últimos  seis meses.